Hace solo unos días este medio desvelaba que Anita Matamoros (18 años), hija de Kiko Matamoros (61) y Makoke (47), había sido despedida por una agencia de influencers por su falta de profesionalidad hace cerca de un año. Los representantes de la joven, puestos en contacto con JALEOS, han querido ofrecer su versión sobre los hechos y especificar que, ante el fin de los trabajos entre su representada y esta sociedad, queda una cantidad de dinero que se debe, 1.452 euros concretamente, y que han procedido a reclamar a la agencia a través de un juicio monitorio. 

"Conforme a lo dispuesto en el artículo 815.1 LEC, requiero al deudor para que, en el plazo de veinte días, pague al acreedor la cantidad de 1.452 euros", así lo recogía el documento al que ha tenido acceso este periódico, que fue aceptado a trámite el 26 de julio de 2018 en el Juzgado de Primera Instancia nº 42 de Barcelona. 

Los representantes de Anita Matamoros, a través de la empresa Present and Future Entertainment SL., aseguran que se reclama esta parte a la agencia, ya que "se cumplió con un trabajo que no se ha pagado", un desarrollo "de forma correcta y en los plazos". Asimismo, han querido dejar claro que "a nivel profesional trabaja muy bien y hay muchos clientes que lo avalan".

Idea que recalcan en un comunicado de prensa publicado este viernes: "Esta empresa cuenta con una gran profesional que se toma su trabajo muy en serio y cumple y ha cumplido con todos sus clientes. Muchos de ellos llegan a solicitar repetir contratos al quedar absolutamente satisfechos. Esta empresa puede asegurar que cada vez son más clientes los que quieren contratarla por su gran profesionalidad y sus resultados", según el documento presentado por la empresa que representa a Anita. 

Respecto a la otra parte involucrada en este proceso, que todavía no había recibido notificación de esta diligencia de ordenación, una vez aceptado a trámite tiene dos opciones: pagar esta cantidad reclamada o presentar un escrito de oposición. En este texto, en caso de que la agencia no esté de acuerdo con esta deuda, debe alegar "de forma fundada y motivada [...] las razones por las que a su entender no debe, en todo o en parte, la cantidad reclamada". 

Despedida de una agencia de 'influencers'

La cantidad que se reclama en este trabajo hace referencia a un proyecto que se le encargó a la joven hace cerca de un año, cuando una agencia de influencers se puso en contacto con Anita, entonces menor de edad. Esta compañía escogió a Ana por petición de una marca para que promocionara una serie de productos a través de sus perfiles en redes sociales, según relató una fuente del sector a este periódico. 

Este trabajo finalizó porque la marca se había cansado de la falta de profesionalidad de la joven, según esta persona. "No vamos a volver a trabajar con ella", porque la joven no cumplía con los requisitos mínimos: "No aparecía el logo de la marca, no se preocupaba por el entorno (se sacaba la fotografía en el portal de un edificio), presentaba las fotografías fuera de tiempo". 

Como consecuencia, la agencia de influencers no solo dejó de trabajar con Anita, sino que perdió a esta marca: "Nunca más se supo del cliente", con el consiguiente perjuicio para todas las personas que trabajan en esa empresa y la pérdida de un contrato grande. 

El tema ha terminado llegando a los juzgados, donde se zanjarán las diferencias de una y otra parte. 

[Más información: Anita Matamoros, despedida de una agencia de 'influencers' por falta de profesionalidad]