Es uno de los rostros que mejor asocia el público con los mapas de paraguas y soles. "Me encanta ser el hombre del tiempo, y me gustaría serlo siempre", comenta en una entrevista a JALEOS. Es consciente de que nadie se mueve de su sofá sin saber sus pronósticos para salir a la calle ahora que el cambio climático ha modificado el modo de vivir. A Roberto Brasero, el hombre del tiempo de Antena 3, no se le cae la sonrisa de los labios llueva o truene. Con su libro La influencia silenciosa hace sus preediciones sobre las consecuencias del cambio climático.
El meteorólogo ha concedido una entrevista a este medio en la que habla de su profesión, su familia y cómo la popularidad le ha cambiado la vida.
Es usted consciente que ha creado escuela con su manera de relatar las precipitaciones, los frentes o los vientos alisios… algunos ya le llaman el 'showman' de la isobara.
(Risas) Yo era un simple periodista de Telemadrid cuando me propusieron dar el tiempo. Fue de la mano de Elena Sánchez, que nos dejó desgraciadamente. Cuando era directora de informativos de la cadena se le ocurrió, y me dijo: "vas a empezar a dar el tiempo" y así empezó Brasero como meteorólogo. Nunca podré agradecerlo lo suficiente que confiara en mí.
Esta forma de presentar ya le ha valido una Antena de Oro. ¿Cómo se le ocurrió esta fórmula?
No hay fórmula. Hice lo que yo realmente quería hacer, y lo mejor de todo es que seis años después sigo haciendo lo que quiero hacer y coincide con lo que me gusta. Tuve claro que en el tiempo tenía que incorporar la ayuda de los espectadores. El tener una cámara de fotos y vídeo en el bolsillo y, la inmediatez de tránsito, es un tesoro que hay que conservar. Si cae una tormenta en un pueblecito de Burgos lo tengo accesible desde mi dispositivo. Siempre hay alguien que puede grabar lugares más alejados.
¿Qué le dice su hija pequeña cuando le ve por la tele?
Me hizo mucha ilusión que hace solo una semana la pequeña de cinco años se me acercó y me dijo: "Papá te he visto en la tele". Habíamos estado toda la familia en el norte de vacaciones y grabé unas imágenes que reconoció. Creo que se extrañó de ver a su papá en la tele.
¿Esa fama ha cambiado la vida del chico de Talavera de la Reina que quería ser periodista?
Es que yo más que famoso soy popular. Estoy en los salones de la gente mientras cenan y comen. Te haces presente. Pero famoso no. No quiero dedicar nada a ser famoso.
¿Es más fácil lidiar con isobaras y termómetros que con niños?
Tengo cuatro hijos magníficos. Ellos son los que me dan mas caña. Me dicen que cuando salimos hago mas fotos de las nubes que de ellos. De vacaciones me tengo que cortar para hacer alguna foto familiar. La deformación profesional me puede.
Le dedica su último libro a su esposa Beatriz...
Que menos que dedicárselo a ella. Ha tenido que aguantar los tiempos de espera hasta que el libro ha estado en el mercado. Eso se traducía en quitarle horas a la familia. Beatriz es una compañera que lo entiende todo, ha vivido esta profesión y sabe lo que es.
¿Todo, todo lo entiende? Le propusieron participar como concursante en 'A bailar' un programa de baile por parejas y ella le dijo que "nan nai".
(Risas) Es verdad Beatriz no quería que participáramos. Se lo insinúe en la cena y nada de nada, no la convencí. Y sin pareja no se podía concursar así que me quede sin pista de baile. En otras ocasiones también me lo han ofrecido. Alguna vez he ido sin ningún problema. Sí que he compatibilizado con el tiempo otros programas. Como un espacio en Nova que se llamaba 'Pórtate bien' para niños en 2009.
¿Por qué motivo se apostaría el bigote en un directo como aquel presentador del tiempo?
Los meteorólogos no usamos una bola de cristal en las previsiones. Por eso yo no me he dejado bigote. Los hermanos Medina sentaron escuela en la metereología. Mariano murió hace muy poco y se puede sentir orgulloso de todo lo que hizo. Para un meteorólogo aquellos días en los que los pronósticos se deberían haber cumplido y no fue así, son los que más se recuerdan.
¿Liga tanto como Mario Picazo, 'el Adonis' del tiempo?
Yo soy el simpático del tiempo. Pero sí, si tuviera que ligar ahora, que no es el caso, ligaría más. Sales por ahí y por ser un rostro popular tienes ese primer trayecto ganado Si tuviera que ligar ahora me da la sensación que ligaría mas.
Usted que es tan refranero: ¿cuál se le ocurre para esta época?
En el otoño la mano al moño.
La frase "fallas más que el hombre del tiempo", ha pasado a mejor vida... ¡ahora les creemos a pie juntillas!
Ole. Me encanta ser el hombre del tiempo, y me gustaría serlo siempre. La gente siempre puede encontrar algo nuevo en el tiempo.
[Más información: 'Huracán' Brasero: el hombre del Tiempo que no ha faltado a ningún Telediario desde 2005]