Manuel Cortés acude al funeral de su padre, Chiquetete, acompañado de Kiko Rivera

Día de duelo en el mundo de la música y más concretamente en el seno de la familia Cortés Pantoja. El cuerpo sin vida de Antonio Cortés, conocido artísticamente como Chiquetete, llegaba en torno a las 12:20 de la mañana a la plaza del Cristo de la Cinco Llagas, el espacio que erige el Santuario de Nuestro Padre Jesús de la Salud y María Santísima de las Angustias Coronada, la histórica iglesia del Cristo de los Gitanos.

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El templo donde yacen los restos de la duquesa de Alba acogerá también los del artista fallecido el pasado sábado de madrugada a causa de un infarto tras sufrir complicaciones por una intervención de cadera. Curiosos y medios de comunicación se agolpaban y esperaban la llegada de sus amigos y familiares. La más esperada, la de su hijo pequeño, Manuel Cortés Bollo (23), fruto del matrimonio del cantaor con la colaboradora de televisión Raquel Bollo (43).

Manuel Cortés y Kiko Rivera en el funeral de Chiquetete. Gtres

El único vástago varón de la pareja asistía, cabizbajo y con semblante serio, acompañado por su 'primo', Kiko Rivera (34), representación del clan Pantoja, junto a Bernardo, hermano de la tonadillera. Ni Isabel Pantoja (62), ni Agustín (54) ni Juan, tres hermanos que han pasado toda su infancia, juventud y madurez junto a Chiquetete, han acudido a despedir a su primo hermano. Otra gran ausente ha sido Alma Cortés Bollo (19). La hija más pequeña de Chiquetete tenía apenas tres años cuando sus padres se divorciaron y en esta ocasión ha preferido no acudir y no pronunciarse al respecto. 

Según han informado desde El Programa de Ana Rosa, tanto Carmen Gahona (62) como alguno de los hermanos mayores de Manuel han entendido su presencia como una provocación, sin embargo los amigos de Chiquetete aseguran que le honra y que es lo que le hubiera gustado al artista.

Carmen Gahona llegando a la iglesia del Cristo de los Gitanos en Sevilla. Gtres

Tras la misa, el féretro será trasladado a Carmona, la localidad sevillana en la que Antonio ha vivido junto a su última mujer, Carmen Gahona, los últimos años de su vida. Allí será incinerado y sus restos volverán a la iglesia del Cristo de los Gitanos. Profundamente creyente y hermano de la centenaria cofradía sevillana, Chiquetete descansará en la iglesia que tantas alegrías le reportó, junto a las imágenes en las que tanto creía y con las que se emocionaba cada madrugá de la Semana Santa de la capital hispalense.

Dolido con su padre

Tras el entierro, Manuel ha hablado en Sálvame, visiblemente afectado. "Esa figura de padre le pertenecía a él y no ha podido ser. Sé que hay mucha gente que no lo entenderá, pero me he acercado porque lo he sentido así, y me quería despedir de él. Tampoco sé qué más decirte… es complicado por la situación. También me duelen mucho los comentarios que se hacen sobre mi madre, y los comentarios en las redes sociales que nosotros no somos culpables de nada, y muchos menos deseábamos esto. Yo me siento muy triste porque se ha ido una persona que era mi padre, aunque no tuviera relación con él. Me he armado de valor y, como no lo hizo él, al menos poder despedirme", ha explicado. 

Conteniendo el llanto y visiblemente dolido, ha aprovechado para "darle las gracias a mi primo Kiko que ha estado conmigo en todo momento. Desde que me enteré me fui a dormir a su casa".

Ha aprovechado, además, para agradecer a sus hermanastro: "Me ha faltado también dar las gracias a sus tres hijos mayores, que me han dado el sitio que, quizá creo, que me correspondía. Pero también era difícil saber si podía ser así o no".

Pero si ha habido una persona a quien ha querido agradecer, más que a nadie, ha sido a su madre: "Esa persona que está ahí sentada, que es mi madre, que le deis cariño porque no es fácil. Y darle las gracias que ella, aunque lo sabe, que la adoro, que gracias por entender mi dolor, que cualquier otra persona os aseguro que no lo haría". 

[Más información: Manuel, hijo de Chiquetete y Raquel Bollo, devastado tras la muerte de su padre]