La muerte del diseñador Elio Berhanyer ha conmocionado al mundo de la moda que tanto ha sentido su pérdida. La gran aguja española fallecía este 24 de enero, coincidiendo con la inauguración de la MBFWM, antaño pasarela Cibeles.
Iba a ser este viernes cuando se expusiera en el Museo del Traje de Madrid su capilla ardiente a partir de las cuatro de la tarde, pero finalmente se adelantará a este jueves 24 de enero, el día en que ha fallecido. Así las cosas, se le podrá rendir un sentido homenaje en el Museo del Traje, donde familiares, amigos, y anónimos irán a darle un último adiós.
Berhanyer, cordobés de nacimiento, moría en su casa en Madrid tras una larga vida llena de éxitos, de premios y de reconocimiento por parte de modelos y amigos. En febrero de 2013 recibía de la mano de los que fueran Príncipes de Asturias, Felipe VI (50 años) y Letizia (46), uno de los premios nacionales de cultura 2011-2012. El gran amigo de la duquesa de Montarco siempre tenía una buena palabra y un buen gesto para todos. Cómo no, este artífice del diseño guarda entre grandes amigos a la Condesa de Montarco, su hija Alejandra de Rojas (37), la sobrina del rey Juan Carlos (81), María Zurita (42), Marilí Coll, Francis Montesinos (68), Norma Duval (62), modelos como Judith Mascó (49), entre tantas caras conocidas.
Con 17 años, Berhanyer, que nunca fue al colegio y que aprendió a leer y a escribir de forma autodidacta, se instaló en Madrid, donde empezó a trabajar como escaparatista en una peluquería de Elisabeth Arden y, después como creador de vestuario de teatro junto a Gustavo Pérez-Puig.
La fama le volvió algo excéntrico y llegó a tener dos guepardos en su jardín, más de cien gatos y numerosas pinturas y esculturas de valor incalculable, además de un lujoso Rolls Royce. Ajeno a las tendencias del momento, Berhanyer defendía las líneas puras y austeras y una elegancia serena y refinada. Sus colecciones las blindó contra el paso del tiempo y de las modas. "La elegancia reside en la discreción", aseguraba. Y bajo esos acordes durante la década de los setenta y ochenta confeccionó, entre otras cosas, los uniformes para la compañía aérea Iberia.
Elio Berhanyer, Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes en 2002, en su empeño de tener identidad, personalidad y sello propio, ni aceptó la proposición de Balenciaga ni la de Yves Saint Laurent. "No quería trabajar bajo ninguna influencia y a día de hoy no me arrepiento", decía el creador.
Siempre vestía en tonos blancos y negros y lucía la kipá -casquete redondo, semejante al solideo, usado por los judíos practicantes, especialmente en los actos religiosos- y que según él este casquete expresaba "la convivencia pacífica de las tres religiones" durante el Califato de Córdoba.
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