Bertín Osborne (64 años) se ha sentado en el plató de Sábado Deluxe donde ha hablado del estado de salud de su hijo Kike, que nació con parálisis cerebral. Tanto el cantante como Fabiola Martínez (46), su esposa, se han volcado en el cuidado del pequeño desde el primer día, y es que el presentador ha explicado que en estos casos uno no puede tirar nunca la toalla porque estas personas dependen de ti totalmente: "Tú tienes que tener claro que esto es para siempre. Pero no solo para siempre, lo peor para nosotros es cuando no estemos. Ahora hago lo que haga falta, pero cuando no esté yo y no esté su madre... Eso es lo que me preocupa de verdad, lo que no me deja dormir. Me da terror pensar qué será de él cuando no estemos nosotros".
Con la mirada vidriosa de quien está a punto de llorar pero trata de reprimir el llanto, el cantante ha destacado la fortaleza que ve en su hijo todos los días: "Él no llora, ni se queja, siempre está besándote y abrazándote".
Ha destacado la actitud del pequeño sobre todo tras sus últimas operaciones. Kike pasó por quirófano hace meses para tratar recuperar la movilidad en las piernas, pero cuando parecía que todo iba bien ocurrió lo inesperado. "Fue muy duro, llevaba ya dos meses con la operación enorme que le hicieron: ocho horas, 19 cortes, músculos, tendones... Quedó muy bien y le pusieron dos escayolas. Cuando se las quitaron empezó a a hacer rehabilitación y, de repente, un día empezó a chillar. Fabiola le daba masajes pensando que era un calambre y era que tenía el fémur roto", ha comentado Bertín.
Lo que le ocurría a Kike es que el hueso se le había roto debido a la osteoporosis que sufre en las piernas. Los músculos, al no utilizarlos esos meses que estuvo escayolado, se agarrotaron hasta el punto de romper el fémur. "Rápido a la UVI, operación del fémur y, de repente, al día siguiente empezó a chillar otra vez porque se la había roto el otro. Entonces, de nuevo a operarle", ha añadido.
Largas horas de espera e incertidumbre en los hospitales que pueden con el ánimo de muchos padres. Aunque Bertín ha asegurado que no es su caso: "Yo lo encajo bien, soy optimista por naturaleza. Mi madre me decía siempre: 'Tú hasta las malas noticias búscale el lado positivo porque seguro que lo encuentras'".
En cuanto a Fabiola Martínez, también lo encaja bien pero porque "no le queda más remedio. Al final aprendes a tener siempre la esperanza de que todo va a salir bien. Pero es curioso que con Kike nos pasa siempre de que nos dice el médico: 'Puede haber una posibilidad remota de que pase esto'. Pues le pasa", ha explicado.
[Más información: Fabiola Martínez desvela la última hora sobre el estado de salud de su hijo Kike]