Nuevo revés para María Teresa Campos (77 años). Por si la malagueña no tuviera suficiente con la lacerante espera a que Mediaset se pronuncie acerca de su renovación de contrato, y con la subasta de la mayoría de sus muebles -a los cuales, pese al éxito de la puja, les tenía gran valor sentimental-, ahora se suma un nuevo quebradero de cabeza a su vida. Ante el fracaso de su línea de zapatos MTC, JALEOS ha podido conocer que los productos ya fabricados y retirados de la venta se encuentran "en un almacén" alquilado para tal menester. Una situación que tiene a la presentadora "enfadada" y en busca de soluciones drásticas: "No está por la labor de que sus zapatos se apolillen en un almacén".
Después de que LOOK informara del difícil bache al que se ha visto abocada María Teresa -este proyecto de zapatos se había convertido, en el último tiempo, en casi una de sus únicas alegrías profesionales-, la que fuera presentadora de Qué tiempo tan feliz ha visto cómo sus zapatos se han retirado de todos los establecimientos y grandes almacenes y hasta de la página web. "El montante de productos se encuentran en ese almacén a la espera de darles salida. Estaríamos hablando de una importante pérdida de dinero", se apunta a este periódico.
De entrada, y ante esa salida in extremis para sus zapatos, este medio ha podido conocer de su intención de venderlos en tiendas 'menores', lejos de los grandes almacenes donde se exhibían antes. Sin embargo, todo hace indicar que no habría un gran interés por los productos MTC, los mismos que hace un tiempo arrasaban sin miramiento y que la Campos no dudaba en darles publicidad en su reality Las Campos. Pese a todo, parece que no solamente su hija Terelu Campos (53) es la única que está adaptándose a la realidad con su línea de joyas. A JALEOS llega una posible solución que la matriarca del clan Campos estaría barajando seriamente: "Ante el éxito de la subasta de sus muebles, no descarta hacer lo mismo con sus zapatos". Y es que, Teresa ha triunfado sin réplica en la venta de las tantas reliquias que poblaban su casoplón de Las Rozas y que no le caben en su nuevo hogar, al que se plantea trasladarse en breve. En los últimos días, la aceptación de sus muebles "ha puesto muy contenta" a Teresa, que estudia "pujar una segunda tanda de sus pertenencias". ¿Estará en esa subasta su línea de zapatos?
Su primera subasta, todo un éxito
Fue el pasado 28 de febrero cuando tocó a su fin la subasta de los muebles de la Campos, después de tres días de puja. Según ha podido conocer JALEOS, Campos ha conseguido recaudar 10.000 euros con esta primera tanda de objetos. El problema es que, pese a lo halagüeño, hay muchos muebles a los que no les ha podido dar salida, desde unos jarrones de 3.000 euros, hasta una pareja de consolas de 6.000 euros, entre otros.
La veterana periodista tomó la decisión de deshacerse de estos objetos porque pronto abandonará el que ha sido su hogar durante décadas, su mansión de 2.000 metros cuadrados de Las Rozas, para vivir en un chalet adosado de 350 metros cuadrados. Una diferencia de espacio que le hace imposible poder mantener todos los muebles que decoran en la actualidad su domicilio.
Para poder solventar este obstáculo, María Teresa se puso en contacto con una conocida casa de subastas de Madrid que ha puesto a la venta los objetos a través de su página web durante los días 26, 27 y 28 de febrero. Además, la malagueña ha contado con la publicidad por parte de los medios que se han echo eco de esta noticia.La nueva propiedad a la que se van a mudar la presentadora y su pareja, Bigote Arrocet (69), se encuentra situada en la localidad madrileña de Aravaca, una de las zonas más lujosas de la capital.
¿Qué hará con ella Mediaset?
El temido mes de marzo ha llegado para María Teresa, el mes en el que los mandamases de Telecinco deben tomar la decisión de renovarle el contrato o prescindir de sus servicios. Hasta el momento, nada ha cambiado y, según pudo conocer JALEOS hace unos días, "Teresa está desesperada por más que intenta mostrar seguridad".
La espera la tiene inquieta y, en su entorno más íntimo, se deja vencer por el desánimo y trata de imponer la cruel realidad. Según se deslizó a este medio, ya lo daría todo por perdido con la cadena. O, lo que es lo mismo, empieza a asumir que Mediaset, esa casa por la que tanto dio, "no le va a renovar ese contrato de larga duración" que en su momento tantas esperanzas le depositó. Eso sí, María Teresa es de esas profesionales "de la vieja escuela, que hasta el último momento se mantendrá en silencio y esperando". Lo cual no quita que, en su fuero interno, ya haya comenzado a asimilar "su presente más inmediato". Sin duda, no corren buenos tiempos para Teresa.
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