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    Dedicándose a sí mismo

    Desde que abandonara el Hospital Universitario La Zarzuela el pasado viernes, el presentador hace su día a día en su casa. Allí está acompañado de su madre y de sus cuatro perros, a los que saca a pasear con la tranquilidad de saber que está de "reposo absoluto", tal y como le recomendaron los médicos.
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    Semblante relajado

    Por las mañanas se deja ver con cazadora para el paseo matutino y a cara lavada, con lo que demuestra su descansada tez. Por las tardes es habitual verle con gafas de sol y auriculares, y siempre acompañado por sus mascotas.
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    Música y mascotas

    "Seguiré las recomendaciones de los médicos, pero no voy a vivir con miedo". El catalán tenía claro al abandonar el centro hospitalario que cumpliría con las pautas de los doctores, y así lo está haciendo. Sin embargo, no va a limitar su vida a los 48 años de edad.
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    Quienes están a su lado

    "Tengo ganas de ver a mis perros", decía emocionado segundos antes de salir del coche frente a su casa. Ahora ellos son los mayores testigos de su recuperación, al igual que sus hermanas, su madre, sus amigos y, sobre todo, Paco, su expareja, que no se separó de su lado durante el ingreso.
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    Un mes de tranquilidad

    Durante al menos 30 días no tendrá que mandar callar a sus 'rebeldes' colaboradores de 'Sálvame' ni apaciguar tensiones en el plató de 'Gran Hermano DÚO'. Lo peor que podrá enturbiar la calma del presentador serán los acelerones o rabietas de sus perros durante el paseo.
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    Aprovechando la primavera

    La energía del sol que se ha asentado en el país también consigue que la estancia de Jorge Javier alejado de los focos sea más placentera. Puede aprovechar el buen tiempo para recargar pilar y desconectar al aire libre, algo que siempre es un plus en cualquier recuperación de salud.
JALEOS