Roswicha Bertasha, conocida artísticamente como Nadiuska (67 años), representa la exuberancia y el éxito en la época del destape, ya que fue una de las actrices del imaginario erótico por excelencia en la época de los 70. De todo aquello solo quedan los recuerdos, y es que su vida en la actualidad nada tiene que ver con lo que ella se hubiese imaginado años atrás. Ahora pasa sus días interna junto a las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús, en la localidad de Ciempozuelos (Madrid).
JALEOS se ha desplazado hasta allí para saber cómo evoluciona la actriz y cómo pasa sus días después de que, veinte años atrás, le diagnosticasen una esquizofrenia paranoide: "Nadiuska vive muy tranquila, calmada y hace vida normal. A veces sale a pasear por el pueblo, y está muy bien", afirma uno de los trabajadores del centro hospitalario. De hecho, son muchos los que por allí conocen a la actriz, y los que aseguran que su deterioro físico es notable.
Lo cierto es que allí lleva una vida normal, igual que la del resto de pacientes internos: comidas, actividades y tiempo libre. Pero si hay algo que marca la diferencia con respecto al resto, es la ausencia de visitas, ya que la mayor parte de la familia de Nadiuska reside entre Alemania y Polonia. Cabe destacar que en lo que a amigos respecta son escasas o nulas las apariciones por parte de aquellos que tanto la admiraban en su día. Y es que tal y como afirma una interna a este medio, "tiene prohibida las visitas de todo aquel que no sea un familiar".
Problemas mentales
Fue objeto de deseo y la inspiración de muchos españoles al protagonizar numerosas películas de temática erótica en los años 70 y 80. Muchos la consideraban la musa por excelencia de la época de la Transición, pero su historia es una continua mezcla de luces y sombras.
A finales de los años 90, y cuando parecía que nada podía ir mejor, comienza a padecer trastornos mentales, de modo que fue trasladada al Hospital Psiquiátrico Alonso Vega, en Madrid, donde le diagnosticaron esquizofrenia. Gracias al tratamiento recibido, mejoró notablemente y en 2002 recibió el alta.
Sin poder recuperarse económicamente, estuvo durmiendo en las calle de la capital sin llegar a encontrar un lugar estable. Así lo retransmitieron algunos programas de televisión en el año 2008. El hecho de que su situación se hiciese pública, implicó que el centro hospitalario Benito Menni de Valladolid le acogiese para tratar su severa enfermedad.
Muchos medios de comunicación han afirmado que Nadiuska es el claro ejemplo de lo que se denomina "juguete roto". Incluso se publicó un libro en el año 2012 llamado así, escrito por Tomás Pérez Niño.
Dice su círculo cercano que ella "ha sido siempre su peor enemiga", y que fue el mal de amores lo que le llevó al declive y a vivir una larga depresión, que derivó en su actual enfermedad. Aquella situación fue el comienzo de su fin y el motivo por el que las ofertas de trabajo llegaron a su fin.
Matrimonio de conveniencia
De madre polaca y de padre ruso, la actriz y modelo llegó a España en 1971, con tan sólo 19 años. Damián Rabal, hermano de Paco Rabal y uno de los mánager más poderoso de aquel momento, es la persona que da la primera oportunidad a Nadiuska en nuestro país. De la época son las películas Manolo, la nuit o Lo verde empieza en los Pirineos.
Su fama comenzó a hacerse indiscutible después de que sus pechos aparecieran plasmados en la revista Guadiana. Era la primera vez que una mujer se mostraba de esa manera. Así fue como se convirtió en sex symbol.
Uno de los mayores escándalos de su vida fue cuando se descubrió que Nadiuska había contraído matrimonio por conveniencia con Fernando Montalbán Sánchez, un enfermo mental. El acuerdo fue arreglado en 1973 por el Damián Rabal para que la actriz obtuviera la nacionalidad española y así poder trabajando en España. El Tribunal de la Rota anuló el matrimonio en 1981.
En 1982 llegó su salto definitivo artísticamente encarnando a la madre de Conan y compartiendo pantalla con Arnold Schwarzenegger. Después, nda volvería a ser igual. la industria del cine comenzó a cambiar y el nombre de Nadiuska fue cayendo poco a poco en el olvido.
Tras la serie Tristeza de amor y alguna que otra aparición en diversos programas de televisión, la actriz y modelo despareció de la vida pública. Fue desahuciada de su apartamento de Madrid y se vio obligada a mendigar y a rebuscar alimento en la basura. Hoy, las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús son su familia.
[Más información: Bárbara Rey, traicionada: la sustituyen por Eva Isanta en los carnavales de Totana]