María Castro (37 años) ha estado presente en el cincuenta aniversario del Parque de Atracciones de Madrid. Allí posó para los medios en compañía de su marido, el osteópata José Manuel Villalba, y la hija que tienen en común, la pequeña Maya (2), cuyo parecido a su padre es más que razonable.
Volcada al máximo en su hija, la actriz, que está terminando de grabar la serie Amar es para siempre, tiene claras sus prioridades desde que en junio del 2016 se convirtiese en madre por primera vez. De hecho, se ha visto en la obligación de decir que "no" en más de una ocasión a propuestas televisivas.
Además, el pasado mes de enero sacó a la venta su primera línea de joyas, que está enfocada, sobre todo, a las madres que quieren lucir complementos modernos y personalizados. JALEOS ha hablado con la gallega.
Estaba ahora en una serie, ¿no?
Si, estoy en Amar es para siempre.
¿Grabando?
Estaremos grabando hasta el 30 de mayo. Ya nos queda poquito. Tengo ganas de terminar porque ha sido un año lleno de secuencias y de guiones. Fui muy feliz porque el ambiente en la serie es muy bueno, pero es verdad que el ritmo de una serie diaria es como una carrera de fondo.
¿Se le hace fácil compaginar el trabajo con el cuidado de la niña?
Es que compaginar y conciliar no existe. Hay que buscarse la vida, con unos abuelos que me ayudan, con un padre que echa una mano dentro de lo que puede. La niña es un tesoro y siempre está contenta. Aunque yo no esté y me eche de menos, hablamos mucho y cuando estoy con ella tengo dedicación absoluta. Cuando entro en casa dejo el móvil, la mochila, y me tiro directamente a jugar.
¿Qué edad tiene ya?
Va a hacer tres años en junio.
¿Maya es inquieta?
Es muy alegre. Todo le va bien. Es muy divertida... venir a esto para ella es un súperplan. Va cantando que "hoy va con papi y mami". Disfruta mucho de estar los tres.No hay tantos momentos en la vida diaria en el que le podamos ofrecer planes de los tres.
¿A qué se dedica su pareja?
Hace un poco de todo. Es osteópata, y ahora hace muchísimos eventos porque fue bailarín y coreógrafo durante muchos años. Hace eventos a nivel creativo con diferentes personas del mundo del espectáculo.
Hoy cumplen cinco años y medio juntos. ¿Alguna celebración especial?
Sí, aunque nos casamos el pasado mes de septiembre. Celebración especial... El día a día. De hecho ayer nos hemos visto solo por la noche porque teníamos que trabajar. Yo creo que el amor se conserva con el trabajo diario, entender, respetar y perdonar al otro porque todos somos diferentes.
Tuvo una temporada de auge en televisión, llegando a aparecer en tres cadenas diferentes a la vez. ¿Se ha vuelto más selectiva desde que es madre?
Sí. Desde que soy madre he dicho que no a muchas cosas, pero no me molesta hacerlo. Antes cuando decía que no por cansancio, me sabía mal. Ahora sé dónde está mi sitio y si digo que no es porque de verdad tengo que estar con mi hija. La que tiene que enseñarle a pedir perdón somos mi marido y yo, etc. Quiero estar presente en cada una de las etapas de la evolución de la niña.
¿Algún proyecto más a la vista?
He sacado mi propia línea de joyas y se llama Pecas joyas. ¿Por qué será? Soy amante de las pecas. Es una línea de joyería en plata, donde también hemos hecho baños en oro amarillo y en oro rosa. A la gente le está gustando muchísimo porque hay una línea para madres, dedicada solo a ellas. Por el hecho de ser madre no significa que haya que llevar perlas, sino que puedes ir muy moderna y diferente, con nombres personalizados. Está teniendo muy buena acogida y de momento estamos vendiendo todo vía 'online'.
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