Actriz, escritora y presentadora. Patricia Pérez (46 años) se dio a conocer en el mundo de la televisión cuando tenía 20 años, y es que a finales de 1993 el programa que dirigía Emilio Aragón (60), El gran juego de la oca, contó con ella como co-presentadora.

Pérez consiguió el reconocimiento de los críticos tras su paso por el famoso concurso de Antena 3, y unos años después decidió mudarse a Argentina, donde ganó experiencia en los platós de televisión, además de estrenarse en el mundo del cine con el rodaje de una película. Después de volver a España y trabajar durante una temporada en algunas televisiones autonómicas como Telemadrid, donde incrementó su popularidad al presentar Mamma Mia, retomó su labor en la televisión nacional para ponerse al frente del programa de Telecinco, Vuélveme Loca.

Pero antes de dar el salto, más concretamente en el año 2005, conoció por el camino a la que en la actualidad es una de las personas más importantes de su vida: su marido, Luis Canut. Ambos se dieron el 'sí, quiero' en octubre del año 2007 en una ceremonia íntima celebrada en Pontevedra, a la que acudieron numerosos rostros conocidos como el cantante Raphael (76) o Natalia Figueroa (79).

Llevan casi quince años juntos, y aunque no tienen hijos, sí tienen tres perros que para ellos son un miembro más en la familia. Así lo demuestran en sus diferentes publicaciones de redes sociales.

Compaginó sus últimos tiempos en la pequeña pantalla con los estudios de Naturopatía, y se especializó en alimentación energética y ortomolecular. Lo más curioso de esto es el motivo por el que eligió este camino, y es que una galleta le cambió la vida. Este producto le creó un día una reacción alérgica por la que acabó hospitalizada con una anaflaxia severa: "Mi cuerpo sufrió un envenenamiento y a partir de ahí empecé a estudiar y a leer libros de cómo podía empezar a cuidarme. Surgió como una obligación, pero se convirtió en mi pasión y en mi modo de vida", contó en una entrevista. 

Uno de sus primeros pasos en el mundo de la nutrición fue colaborar como coach nutricional en el reality de MTV Alaska y Mario Vaquerizo. Poco después se volcó en la publicación de su primer libro, Yo sí que como, cosechando un gran éxito en ventas de ejemplares. Sus propuestas se basan en comer tres veces al día, pero, eso sí, respetando los horarios y no mezclando alimentos sin sentido. Resalta la importancia de la mente e incide en que clave está en mantener la calma y en no obsesionarse con la cantidad de calorías ingeridas.

Fue tanto el boom que generó con su primer libro, que en 2015 vio la luz Yo sí que cocino, Yo sí que me cuido (2016) y Yo sí que como 2 (2018). Pero no todo ha sido un camino de rosas, ya que su éxito también generó las críticas de expertos en la materia y de algunos medios de comunicación, que se negaban a aceptar como alguien que sale de la televisión haga ese tipo de reflexiones y de consejos sobre cómo alimentarse.

Cuando su vida no podía ir a mejor, Patricia sufrió uno de los golpes más duros de su vida cuando, en marzo del pasado año, falleció su padre, al que estaba muy unido. Las muestras de cariño, el apoyo de su familia y el paso del tiempo han sido claves para que la presentadora superase el bache.

En la actualidad reside en Valencia junto a su marido, al que apoya en todos y cada uno de sus proyectos. Sus dos perros también juegan un papel importante en su día a día, como buena animalista que se considera. Lleva una vida tranquila, desvinculada por el momento del mundo de la televisión, y volcada en sus proyectos de nutrición, que se han convertido en su modo de vida.

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