Isabel Pantoja (63 años) se encuentra en una nueva encrucijada. En esta ocasión, nada tiene que ver con sus controvertidos asuntos televisivos ni tampoco con su siempre polémica familia. La popularidad de la tonadillera y del lugar donde vive, la gaditana finca de Cantora, sumado al fanatismo acérrimo de algunos de sus seguidores, está provocando que a las puertas de su casa estén teniendo lugar decenas de accidentes de tráfico en los últimos meses.
El más reciente, este lunes por la tarde, según la información a la que ha tenido acceso JALEOS en exclusiva. En torno a las 17 horas de este 12 de agosto, un vehículo con dos personas de procedencia gallega en su interior frenaba en seco a las puertas de Cantora con la intención de girar a la izquierda, donde se halla otra finca, poder aparcar, descender, cruzar andando la carretera comarcal y hacerse una foto con el cartel que anuncia la entrada de la mansión de Isabel Pantoja.
La frenada del coche en plena carretera provocó que los dos vehículos que venían justo detrás no pudieran controlar la velocidad ni la distancia y acabaran colisionando en cadena. El resultado, siete personas heridas, atendidas de urgencia por SUAP (Servicio de Urgencia de Atención Primaria Janda interior con base en Medina) y, a continuación, como marca el protocolo en estos casos, fueron trasladadas al hospital más cercano: al Hospital Universitario de Puerto Real. Todos están fuera de peligro.
Cantora se encuentra situada en la carretera comarcal A-396 entre Medina Sidonia y Barbate. El vehículo principal del siniestro con las dos personas de Lugo provenía de la localidad de Medina Sidonia. En ese caso, las 500 hectáreas de la finca propiedad de Isabel Pantoja y su hijo Kiko Rivera (35) queda a la derecha de la calzada, precedida por una impresionante arbolada de eucaliptos que impiden la visión de la casa desde lejos.
De forma espontánea, los curiosos se percatan de que están justo enfrente de la finca de Isabel y, a menudo, deciden moderar su velocidad o en el peor de los casos, frenan por completo su marcha causando este tipo de accidentes.
La finca Cantora, lugar de paso para muchas personas que viajan en sus coches hacia las playas del sur de Cádiz, es la casa que tanto Isabel Pantoja como su hijo, Francisco Rivera, recibieron en herencia del torero Francisco Rivera 'Paquirri' tras su muerte por asta de toro en septiembre de 1984. Esta magna propiedad se encuentra ubicada entre los municipios de Medina Sidonia y Vejer de la Frontera, en la conocida como ruta del toro, dentro del camino de los pueblos blancos del Sur. La finca posee 500 hectáreas de terreno y una casa de 2.000 metros construidos.
Ahora Isabel Pantoja se encuentra, a la entrada y salida de su casa, con un problema tan grave como imposible de controlar. Nada puede hacer la intérprete de Marinero de luces para que sus fans, llegados desde todos los puntos del mapa, no paren a las puertas de su finca con la intención de inmortalizar una imagen para el recuerdo. Un recuerdo que, como en esta última ocasión, puede verse tornado en amargo.
[Más información: 'Lazos de Sangre': auge y caída de Isabel Pantoja, la viuda de España]