Quedan unas horas para que Rafa Nadal (33 años) y Xisca Perelló (31) se den el 'sí, quiero' en la exclusiva finca de Sa Fortaleza de Pollenca. Ya son algunos los invitados que van llegando al recinto, y uno de los que más ha sorprendido y captado la atención de los medios ha sido el rey Juan Carlos I (81), que pese a que se había hablado en estos días de su posible presencia, nada estaba confirmado.
A su llegada, que ha tenido lugar pasadas las 12:30 horas, el monarca ha saludado desde el vehículo con la mano a los periodistas congregados a las puertas de esta finca a la que solo se puede acceder con permiso, todo ello elegido y decidido por la pareja de contrayentes para preservar su intimidad. Una treintena de periodistas y una docena de curiosos esperan a las puertas de sa Fortalesa.
Uno de los primeros en llegar ha sido el sacerdote que oficiará la ceremonia y amigo de la familia del deportista, el fundador de Proyecto Hombre, Tomeu Catalá.
También han llegado ya el entrenador de Nadal, el también tenista mallorquín Carlos Moyà, con su mujer, Carolina Cerezuela.
Por el acceso situado junto a la base militar de Pollensa, a lo largo de la mañana han ido entrando varios turismos, minibuses y autobuses con invitados a la boda. Junto a esa entrada esperan también cuatro jóvenes tunos de Cáceres, seguidores de Nadal, así como algunos curiosos y ciclistas que se han detenido al ver a la prensa.
Desde la Academia de Rafa Nadal, en Manacor, han salido dos autobuses con familiares. En ellos iban, entre otras personas, los tíos de Nadal, Toni (su exentrenador), Miquel Àngel (exfutbolista del Barça y la selección) y Rafa, que han acudido por la mañana a ese punto de encuentro para ir juntos hacia Pollença.
Este viernes fueron llegando al Puerto de Pollença varios amigos de la pareja como los tenistas Marc López (37), Feliciano López (38), David Ferrer (37) y el argentino Juan Mónaco, el entrenador Francis Roig, el médico Ángel Ruiz-Cotorro y los empresarios Manuel Piñera y Richard Mille.
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