Fabiola Martínez (46 años) ha dado el pistoletazo de salida a la Navidad de la mano de las hermanas Osborne: Eugenia (33), Claudia, Alejandra y Ana Cristina Portillo. De lo más unidas y cómplices, las mujeres más importantes de la vida de Bertín Osborne (64) fueron las encargadas del encendido de Sevilla Fashion Outlet que este año colabora con la causa solidaria de Andex.
Allí, Fabiola ha abierto su corazón y ha opinado tanto de la evolución del pequeño Kike como de la dramática situación por la que atraviesa Venezuela y cómo está viviendo este aciago momento su familia de allí.
Se las ve muy unidas a todas las mujeres de la casa, ¿suelen quedar?
Solemos quedar, pero cada vez es más difícil que podamos coincidir todas porque Alejandra está viviendo entre Sevilla y Jerez, Eugenia en Madrid, Claudia dentro de poco se va a escribir un libro y se va a la India... Coordinar que estemos todos es complicado, estas Navidades especialmente. Siempre buscamos un hueco para estar juntos.
Van a estar juntos en Navidades
No, estas Navidades serán más complicadas pero, bueno, estábamos hablando de escoger un día cualquiera como si fuera nuestra Navidad.
Kike comenzó un tratamiento nuevo
El tratamiento no es nuevo, lleva ya bastante tiempo, pero lo que pasa es que justo después de la operación hubo tantas complicaciones que él no pudo retomar ese tratamiento que ya había empezado. Cuando yo publiqué 'el primer día después de la operación' era que retomaba otra vez el trabajo intensivo que hace con todas estas máquinas. Ahora le están probando una cosa con la mano, él brazo derecho no lo mueve muy bien, ahora le han empezado a hacer una terapia que vamos a ver, creo que le ayudará seguro.
Tiene familia en Venezuela, ¿cómo está la familia allí?
La familia regular, yo tengo aquí a mis padres y a mi hermano, pero tengo a mis abuelas, a mis tíos, a mis primos y es bastante duro. Nosotros mandamos alimentos para mi abuela que está bastante delgada porque no hay, es muy heavy. Dentro de lo que cabe intentamos ayudar y hay veces que no es cuestión de tener los medios, es hacerle llegar las cosas, si no hay combustible y la empresa deja el envío en Caracas, luego no llega a Maracaibo. Es como decir que no se puede mover entre Madrid y Sevilla.
Fabiola, muy apenada con Venezuela
En Venezuela no tienen combustible
Ese es el tema, ahí vamos, poco a poco, ayudando como podemos. No debería decir esa palabra. Yo estoy muy preocupada, Venezuela está en una situación muy límite pero queda España y quien dijo aquello de que Venezuela era un ejemplo, hoy tiene posibilidad de cambiar las cosas.
¿Eso va por Pablo Iglesias?
Sí, totalmente. Por él, él era el que decía que era un ejemplo Venezuela, era un ejemplo a seguir, teníamos que fijarnos en ese gobierno tan democrático, vamos a ver lo que hacen en España.
Las lágrimas de Bertín al hablar de Kike
Fue el pasado mes de octubre cuando tuvo lugar la presentación de la campaña Sin Instrucciones. Su objetivo era claro: apoyar, orientar y asesorar en la medida de lo posible a los familiares con hijos aquejados de parálisis cerebral. Ellos conocen a la perfección la enfermedad, ya que su pequeño Kike la padece. Desde que vino a este mundo, el matrimonio no ha hecho otra cosa que remar a favor de obra, luchar por la vida de su niño a través de esta fundación. Sobre todo, desde su atalaya privilegiada, Bertín y Fabiola ayudan a miles de personas que viven día a día su mismo caso.
El acto lo presentó el propio Osborne, el cual apenas si podía reprimir las lágrimas. Es más, desde el minuto uno se rompió en directo de pura emoción. "Hoy es un día muy especial porque, además del Día Internacional de la parálisis cerebral, es el aniversario de nuestra fundación. Es el día mundial de las personas invisibles", comenzó su discurso el presentador de Mediaset. A él no le gusta llamarlo parálisis, mejor lesión: "Son personas brillantes que están encerradas en un cuerpo que no les pertenece. Kike es un tío muy inteligente". Y, como chascarrillo, remataba: "Y al que le gustan mucho las mujeres, sobre todo rubias".
[Más información: Las lágrimas de Bertín Osborne al hablar de la enfermedad de su hijo Kike]