Silvia Jato (48 años) está viviendo unos días llenos de angustia y preocupación. La presentadora se encuentra confinada en casa mientras su pareja, Alberto Fabra (55), expresidente de la Generalitat Valenciana, permanece en la UCI del Hospital General de Castelló a consecuencia del coronavirus.
El político ingresó hace una semana, el pasado martes 17 de marzo, en el hospital con síntomas compatibles con el COVID-19 y la prueba que le realizaron en el centro sanitario dio positivo y confirmó el virus en su cuerpo. Tras varios días en manos de profesionales, este martes tuvo que ser trasladado a la Unidad de Cuidados Intensivos ya que, según informaban fuentes cercanas al PP, "su estado había empeorado en las últimas horas".
Ante esta complicada situación, y siendo testigo de la gravedad de su pareja, Silvia Jato se ha mostrado devastada en sus redes sociales. La presentadora ha compartido una imagen muy significativa en su perfil de Instagram que retrata el difícil momento que vive. Se trata de la estampa de varias vírgenes y figuras de ángeles junto a una vela encendida.
De esta forma, Jato ha manifestado cómo está dirigiendo todas sus plegarias hacia la mejoría de su novio y a ver pronto una luz que indique que hay motivos para la esperanza. Y parece que sus oraciones han sido escuchadas, porque según las últimas informaciones emitidas por el entorno político del paciente, Alberto Fabra está "respondiendo bien a los tratamientos sanitarios" que le están suministrando y "muestra una situación de optimismo moderado, dentro de la gravedad". Una noticia que seguro ha tranquilizado a su pareja en mitad de su preocupación.
Ya cuando se conoció su ingreso, el senador comenzó a recibir muestras de cariño de amigos y allegados, y quiso agradecer el gesto, además de felicitar y reconocer el trabajo de los médicos y enfermeros: "Mi reconocimiento más sincero a todos y cada uno del personal sanitario que estos días está trabajando sin descanso, ayudando a los castellonense, y demostrando que estamos en las mejores manos".
En esa misma línea lo hizo Silvia Jato cuando aún tenía fuerzas para sonreír y enfrentarse con esperanza a la enfermedad de su novio. "A todos los sanitarios de este país y en especial de #comunidadmadrid os dedico la mejor de mis sonrisas por el trabajo que estáis haciendo día a día y que no se refleja en los informativos. Estáis sin rostro... Gracias de corazón", escribía la televisiva en sus redes sociales.
A pesar de su positividad, Jato está viviendo un difícil momento que se agrava aún más debido a la distancia que debe mantener con su pareja. Él, en la UCI y ella, en casa. La desesperación por saber y por que todo mejore es el único pensamiento que inunda la mente de la presentadora estos días.
Entre rezos y peticiones, Silvia también recibe el apoyo virtual de sus compañeros de profesión y amigos como Alicia Senovilla (50) y Poty Castillo.
Silvia Jato y Alberto Fabra se conocieron hace cuatro años y a pesar de que intentan llevar su vida privada de forma discreta, no pueden evitar gritar su amor en fechas tan señaladas como el Día de los Enamorados: "El amor se escribe en besos y los besos en versos. Feliz día de San Valentín #sanvalentin #miamor. No me canso de mirarla...". Esto es lo que escribía la gallega el 14 de febrero junto a una fotografía a modo de dibujo en la que ambos aparecen dándose un apasionado beso. Esa imagen tan representativa demuestra el dolor que en estos momentos debe estar sintiendo la presentadora mientras su pareja lucha por superar el temido coronavirus.
[Más información: Silvia Jato, la 'maestra' de Christian Gálvez, rompe su silencio tras el adiós de 'Pasapalabra']