"Tengo el minuto más visto de la historia de Telecinco con Ismael Beiro bajando del helicóptero". Esta es la respuesta que da, orgulloso, Fernando Acaso (56 años) cuando en el 20º aniversario de Gran Hermano fue preguntado por un momento épico en su carrera televisiva. Nadie más puede presumir de ese privilegiado estatus salvo el ganador de la primera edición del reality que copaba con él ese instante en la pequeña pantalla.

Acaso no estaba allí por casualidad. El presentador ya se había labrado su carrera poco a poco. Era un rostro habitual y querido de la cadena de Paolo Vasile (67) antes de catapultar su carrera junto a Mercedes Milá (69) en un nuevo formato que 'encerraba' a un grupo de personas en una casa llena de cámaras en, entonces, Soto del Real -que después se trasladó a Guadalix de la Sierra-.

Fernando era el reportero que desde las inmediaciones de la casa conectaba con el plató y el que tenía contacto con los concursantes nada más salir expulsados en cada gala. Pero antes de enfrentarse al frío de las noches madrileñas y a la presión del prime time, el periodista se había formado en el famoso Qué apostamos y en el cálido programa matutino de María Teresa Campos (79), Día a día. Allí estuvo primero durante cuatro años (de 1996 al 2000) y tras el periodo de dos años en Gran Hermano, retomó su labor como colaborador, de nuevo junto a Terelu (55) y su madre, pero también en otro programa de peso de Telecinco como fue A tu lado, presentado por Emma García (47).

Este mismo otoño de 2020, Sálvame ha recuperado unas imágenes de la hemeroteca de Día a día por la participación de Alonso Caparrós (49) como colaborador en el programa, en el que, según ha desvelado, no era bien tratado por Terelu ni Carmen Borrego (53). Pues de esta manera, la figura de Fernando Acaso ha vuelto a la pequeña pantalla, gracias a que compartía espacio con el presentador de Furor.

Ambos eran los responsables de interactuar con la audiencia y presentaban el concurso Quien mucho habla que era muy seguido por los espectadores debido al carácter juvenil y divertido de sus dos protagonistas. Por lo que la cara de Acaso ya era reconocida por todos los hogares españoles. Y un día decidió dar un cambio radical.

Dio un salto muy arriesgado: convertirse en personaje. Participó en La granja, un reality presentado por Terelu en el que más de una decena de famosos debían convertirse en auténticos granjeros y despertarse con el canto del gallo, ordeñar las vacas dos veces al día, limpiar bosques o campos, fabricar mermeladas, dar de comer a los caballos, sacar las ovejas a pastorear, pelar los conejos... Y Fernando fue uno de los grandes protagonistas de la edición por dar mucho juego, muchos vídeos y apasionantes edredonings con la venezolana Alicia Machado, Miss Universo 1996.

La reina de la belleza se enamoró perdidamente del presentador y comenzaron un intenso acercamiento ante las cámaras hasta el punto de que mantuvieron relaciones sexuales en varias ocasiones. En una de las galas emitieron las tórridas imágenes que ya han pasado a la posteridad de la televisión española por la frase que se le escucha decir a ella: "Dame un poquito más".

A la joven venezolana no le afectó esta polémica, ya que su peor episodio mediático fue con el mismísimo Donald Trump (74), actual presidente de Estados Unidos. Y es que el magnate la denigró llamándola "Miss Piggy" cuando se hizo con la corona de Miss Universo el mismo año en el que Trump adquirió los derechos de este concurso. Tras hacerse con la banda comenzó a engordar y Trump decidió insultarla y avergonzarla públicamente refiriéndose a ella como "Miss Ama de Casa" por su peso y su condición de latina.

Polémicas aparte y volviendo a Fernando Acaso en particular, su vínculo con la televisión quedó relegado en sus próximos años. Así, en 2007 decidió probar suerte en el mundo de la interpretación. Y no le fue nada mal. Se adentró en el cine y el teatro, y llegó a obtener varios papeles pequeños pero de gran visibilidad en series muy conocidas del panorama español como Cuéntame o El comisario. 

También supo ganarse la vida en el mundo de los escenarios y participó en obras prestigiosas como Adulterios y Marlene. Y en el séptimo arte también hizo sus pinitos en H6, Diario de un asesino y Las cajas, un mediometraje ambientado en la Segunda Guerra Mundial.

Pero su gran vocación siempre fue el doblaje. Ya desde pequeño lo tenía claro. De hecho, a las 10 años de edad logró su primera oportunidad en este mundillo. Tenía un gran maestro, su padre, Félix Acaso, que fue uno de los mayores expertos de esta modalidad en nuestro país.

El primer trabajo de Fernando fue en la película Las largas vacaciones del 36 de 1973, donde doblaba las vivencias de un niño español en plena guerra civil. Otro de sus papeles infantiles más recordados fue en la serie policíaca El inspector Canon donde daba vida a otro menor.

"En 1984 comencé de una manera ya profesional hasta el año 1992, en el que decidí ampliar mis actividades artísticas y en el mundo de la comunicación, aunque sigo ligado a ello ya que desde el año 2000 tengo una empresa de locución a través de internet que ofrece voces de locutores profesionales en casi todos los idiomas, además de impartir clases de locución y doblaje: Escuela de Doblaje Fernando Acaso", narra en su web oficial.

También ha utilizado su talento para ejercer de coach impartiendo cursos de su especialidad y ha trabajado como profesor de voz en el Colegio de Abogados de Madrid y en el Colegio de Médicos de la misma comunidad.

En la actualidad, por tanto, está inmerso en su faceta de maestro de doblaje pero también está encima de las tablas gracias a la obra teatral La venganza del señor Pellicer que representa junto al conocido actor Julián Valcárcel.

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