El escándalo más rentable de Zayra, la hija de Guti y Arancha: sus objetivos y la preocupación familiar
La joven está en el punto de mira por sus polémicas y JALEOS sabe cómo lo está viviendo su familia y las ofertas que ha recibido.
15 enero, 2021 01:28Noticias relacionadas
Zayra Gutiérrez de Benito (20 años) está en boca de todos y los programas de televisión y medios digitales no paran de hablar de ella. Desde hace unas semanas, la hija de Guti (44) y Arancha de Benito (50) vive afincada en la polémica. Lo que empezó como una fiesta ilegal en plena pandemia -de la que la joven terminó pidiendo disculpas públicas- ha derivado en las últimas horas en una supuesta vida disoluta, cargada de descontrol y desfase, y con una conflictiva relación con sus padres y, en especial, con su madre, todo presuntamente y como se ha hecho constar en el espacio Sálvame.
A dicho programa ha acudido una expareja de Zayra para hablar de su personalidad, al tiempo que se han filtrado mensajes y audios en los que la joven habla en unos términos no demasiado apropiados de su madre durante una conversación privada con una amiga. Sea como fuere, Zayra se ha convertido en el personaje del momento y las informaciones sobre su persona, tal y como se ha aseverado en televisión, no han hecho más que empezar. Ahora bien, ¿cómo está viviendo la familia esta situación? ¿Qué intereses hay detrás de este escándalo? ¿Es verdad que la joven busca fama y postularse como concursante de televisión a golpe de escándalo?
JALEOS ha podido conocer, a través de una buena amiga de la familia, que estas últimas horas han sido especialmente difíciles y complicadas. "Están superadas las dos", se ha deslizado. Arancha está muy preocupada, "lo último que quería es que todo esto saliera en los medios". Es cierto que la relación entre madre e hija ha pasado por diferentes estadios, pero se hace constar que en la actualidad "está todo bien". De Benito ha luchado mucho por su hija en los últimos años, sobre todo desde que entró en la adolescencia. "A veces no ha sido fácil", se explica. Arancha "ha hecho lo indecible" por reconducir a Zayra. Incluso, con internados de por medio. Cuestiones que, como bien se detalla, De Benito siempre ha procurado solucionar de puertas para adentro, y así va a intentar que se sigan produciéndose las cosas. No va a tolerar que sus cuitas familiares sean debate nacional. "Se han dicho auténticas burradas en Sálvame", sostiene la fuente consultada. Arancha y su hija no descartan emprender acciones legales. Se entiende que se ha llegado demasiado lejos. Además de hablarse "cosas que no son", también se ha emitido un material de Zayra que pertenece a su intimidad. En otro orden de cosas, se desliza que Arancha y Guti han aparcado sus diferencias y "han hablado" sobre su hija en los últimos días.
La persona con la que contacta este medio asegura que Arancha hoy en día está "muy unida" a su hija, son inseparables, aunque, como es lógico, hay comportamientos y acciones que no le gustan de su hija, y se los hace ver: "Zayra es una buena niña, pero a veces se le olvida quién es y la repercusión que tiene todo lo que hace". Este periódico ha confirmado, además, que la joven "está deseando" participar en algún reality. Tanto es así que una persona cercana a Zayra sostiene con este medio que todo este escándalo podría estar orquestado en pos de su participación en algún programa: "Desde hace años se pirra por ir a Supervivientes". Sus aspiraciones no se quedarían ahí: Zayra "quiere dedicarse a la tele". ¿Lo conseguirá? Tiempo al tiempo.
Las fiestas de Zayra y sus disculpas
Zayra se colocó en primera línea mediática a finales de diciembre por organizar una multitudinaria fiesta en la que se incumplieron todas las restricciones sanitarias por el coronavirus. La joven reunió a muchas más personas de lo permitido en una localización secreta en la que bailaron, bebieron y se divirtieron sin respetar las distancias de seguridad y sin utilizar mascarilla. Tras esta 'pillada', la joven salió al paso y pidió perdón públicamente: "Tengo que pedir perdón, de verdad. Yo solo tengo que pedir perdón, no voy a hablar más, es una irresponsabilidad, las cosas como son, es verdad que había más de seis, ya lo he dicho públicamente".
Esas fueron sus palabras y ahí se quedó el desaguisado. No obstante, recién estrenado el 2021 Zayra lo volvía a hacer. Salió de fiesta por las calles de Madrid, con un grupo nutrido de amigos, sin mantener la distancia de seguridad y sin mascarilla. Se pudo ver a la joven, en la pasada noche de Reyes, disfrutando de una salida nocturna sin ningún tipo de medida sanitaria. Estas fotografías daban cuenta cabal de cómo la hija de Guti volvía a salir de fiesta a pesar de las restricciones que hay en toda España, y lo más llamativo de todo, sin mascarilla.
Ver esta publicación en Instagram
Reincidía en su comportamiento. Ya el pasado mes de diciembre, varios vídeos publicados en redes por los propios asistentes a la fiesta ilegal delataban a la hija de Guti. En una de esas stories, compartida sobre las cinco de la mañana, se podía leer el lema "nos encantan las plandemias", utilizando un término negacionista para referirse a la crisis sanitaria por la Covid-19. Zayra es toda una influencer en las redes sociales y ya acumula cerca de 23.500 seguidores. En sus redes sociales son habituales las fotografías junto a su madre, a quien está muy unida. Desde que sus padres se divorciaron en 2009, tras diez años de casados, ambas se volvieron inseparables.
De hecho, Zayra ha heredado la fluidez ante la cámara de su madre, y así lo demuestra en sus vídeos donde habla desde los problemas cotidianos de una estudiante hasta la dieta alimenticia que sigue. En su perfil social enseña sus looks, porque le encanta la moda pero de un modo discreto y urbano sin llegar a querer dársela de influencer. Los chándales y los pantalones y botas militares son su perdición. Tampoco oculta sus momentos de diversión con su grupo de amigos, así como las dedicatorias llenas de admiración hacia su madre.
[Más información: Zayra, la hija de Arancha de Benito y Guti, reincide: su noche de fiesta por Madrid y sin mascarilla]