Este sábado a media mañana, Cayetano Martínez de Irujo (58 años) ha recibido las visitas en el hospital de dos de las mujeres más importantes de su vida. El duque de Arjona fue ingresado y operado de urgencia en la Clínica de La Luz de Madrid este viernes 14 de mayo a causa de los persistentes problemas intestinales que arrastra desde hace casi una década.
Su hermana, Eugenia Martínez de Irujo (52), ha acudido al centro hospitalario para conocer su estado de salud real y comprobar sus avances en primera persona tras la intervención quirúrgica de hace unas horas. La empresaria ha entrado a paso ligero en el hospital, con un estilismo en tonalidades rojo y blanco y con una mascarilla de animal print de cebra -seguramente de su propia colección-.
Tras su visita, la aristócrata ha atendido a los medios para dar a conocer la última hora del estado de salud de su hermano: "Bien, tranquilo", ha comentado Eugenia sobre cómo ha encontrado a Cayetano tras pasar la noche ingresado. Según cuenta la esposa de Narcís Rebollo (51), su hermano se encuentra aún "en cuidados intensivos" debido a esta afección que arrastra desde hace tiempo. "Le está dando mucho la lata", ha expresado con mucha resignación Eugenia.
Pero, sin duda, la visita más especial del día venía de la mano de Bárbara Mirjan (25), la novia de Cayetano. La joven se ha dejado ver con un semblante serio y preocupado. Nada más llegar, acompañada por su padre, se ha apresurado a entrar en el centro hospitalario con ganas de ver a su pareja cuanto antes.
Bárbara continúa al lado del duque de Arjona en estos momentos tras la salida de Eugenia. Desde que la joven y el aristócrata se conocieron en 2016 no se han separado en ningún momento y son el mejor apoyo mutuo, sobre todo en los instantes más delicados como este.
El quinto hijo de la duquesa de Alba ha sido intervenido este viernes 14 de mayo por Enrique Moreno, el mismo cirujano que lo trata desde hace tiempo de estos inconvenientes que azotan su salud.
Enrique Moreno González, médico especializado en cirugía y trasplantes, miembro de la Real Academia Nacional de Medicina, fue el encargado de intervenir al conde de Salvatierra en los años 2015, en Sevilla, y 2016. Según ha llegado a declarar el propio Martínez de Irujo, el doctor Moreno para él es como un "segundo padre" y el hombre que le salvó la vida.
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