La isla de Ibiza parece haberse convertido en el paraíso natural, personal y privado de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso (42 años). Hace unos días, se publicaba que era el cantante Nacho Cano (58) quien recibía a la política en su mansión de Sant Andreu y, tras la filtración de esa información, los paparazzi se han puesto en alerta para poder captar las primeras imágenes de la líder de todos los madrileños en la isla Pitiusa.

Efectivamente, Ayuso, reelegida presidenta autonómica con casi mayoría absoluta el pasado mes de mayo, ha seleccionado Ibiza para desconectar del mundanal ruido y del siempre estresante y tenso debate político del Congreso y el Senado. "Ha sido un flechazo", admitió la número uno del PP madrileño sobre Ibiza ante los medios de comunicación que la esperaban a la salida de un conocido restaurante de Cala Jondal.

Amable, cercana e incluso cariñosa con los compañeros de prensa, Ayuso comentó que pensaba recomendar a todo el mundo que viajase a Ibiza y, además, no tuvo otra que aceptar que fue ahí, en la isla que nunca duerme, donde se fraguó el amor con Alberto González, su nueva ilusión. "La cosa se estrenó aquí, sí", replicó con cierta timidez, aunque con naturalidad. 

Fue el pasado mes de mayo, poco después de lograr la aplastante victoria en las urnas, cuando Isabel Díaz Ayuso era fotografiada paseando por las doradas calles de Ibiza mientras se besaba con Alberto González, el hombre que le ha devuelto la ilusión en el amor. Uno o dos años mayor que ella, madrileño, aunque con raíces andaluzas, divorciado, técnico sanitario y padre de tres hijos menores de edad.

Fue el pasado viernes, día 6 de agosto, cuando Isabel Díaz Ayuso aterrizó en Ibiza. No fue hasta que un tuitero publicó una imagen de la presidenta cuando se supo, de verdad, dónde se encontraba de retiro privado tras un duro año de trabajo público. "Dama de hierro en Ibiza. Cientos de personas salen a saludarla", comentaba este usuario de la red social del pájaro azul junto a la imagen de la presidenta de CAM en un mercadillo artesanal, el Mercado de Dalias, tan propio de la isla y donde se pueden comprar bolsos de rafia, pulseras al estilo hippie, tobilleras e incluso algo de música. 

En estos días, Ayuso no ha querido perderse algunos de los restaurantes más conocidos de Ibiza ni tampoco ha perdido la oportunidad de explorar sus exóticas y cristalinas calas. Las imágenes llaman la atención porque, aparentemente, la presidenta va sin escolta.

Luciendo un atuendo desenfadado, Isabel porta una camiseta básica en color crema de tirantes, unos shorts de tiro alto en marrón chocolate y unas sandalias tipo Hermès a juego. Cabello recogido en una coleta y unas gafas de sol Ray-Ban. Lo más increíble de la estampa es el coche que Díaz Ayuso ha alquilado para explorar la isla balear. Se trata de un modelo vintage bicolor -en verde menta y blanco- que, probablemente tiene capacidad para ser descapotado.

En las fotos, la presidenta no está junto a su pareja, Alberto González, sino con una amiga, que prefiere subirse en el coche mientras su ilustre compañera de viaje atiende a los medios de comunicación que la han interceptado en sus vacaciones privadas, las primeras con tanto fervor y amor popular, y tanto poder democrático, tras los resultados electorales del pasado 4 de mayo.

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