Fue en mayo de 2019, solo unos días después de estrenar su mayoría de edad, cuando las gemelas Victoria y Cristina Iglesias (20 años) deslumbraron en la alfombra roja de la gala MET, la cita de moda más importante del mundo que se celebra anualmente en Nueva York. Entonces se pudo comprobar cómo las hijas de Julio Iglesias (78) y Miranda Rijnsburger (56) habían dado un gran salto de niñas a mujeres y buscaban asentar su perfil como modelos internacionales en el evento más deslumbrante de la Gran Manzana. De eso hace ya dos años, y en este tiempo, las hermanas han demostrado tener otras inquietudes aparte del atractivo mundo de las pasarelas y de las sesiones de fotos.
Las hijas del cantante de Me va, me va están labrando su propio camino en el universo laboral. Tras una infancia sin ir al colegio debido a las continuas mudanzas de sus padres que las obligaban a tener que recibir clases mediante tutores en casa, las jóvenes decidieron cursar estudios superiores en los que están actualmente inmersas; como Diseño de Interiores y Economía por parte de Cristina, y Moda por parte de Victoria. Pero ambas comparten su pasión por la vida sana y la alimentación saludable, por lo que decidieron poner en marcha My Tribeü, su propia de complementos vitamínicos que crearon junto a la afamada doctora Paria, una naturópata muy conocida en Estados Unidos. Anunciaron su "próximo lanzamiento" a principios de abril tras meses trabajando en ello, pero más de siete meses después, la empresa sigue sin inaugurarse. De hecho, esta misma semana, las hermanas han tomado la decisión de dejar de promocionar su marca en sus redes, como forma de desistimiento.
Ante este primer revés laboral de las gemelas, las jóvenes han contado con el apoyo de sus mejores amigas, las también gemelas Victoria y Sarah von Faber-Castell. Las cuatro se conocen desde que eran muy pequeñas, porque han veraneado juntas tanto en Marbella como en Miami. Y estos días se han dejado ver muy unidas en varios planes de ocio que han llevado a cabo en campos de golf y salidas con caballos, pues son algunas de sus grandes pasiones.
Las hermanas Faber-Castell a pesar de que solo tienen 25 años -5 más que las gemelas Iglesias- saben lo que supone levantar un negocio y los quebraderos de cabeza que ello conlleva, por lo que se han convertido en las mejores consejeras para las hijas del cantante. Y es que las jóvenes Faber-Castell son las herederas del todopoderoso imperio de lápices que lleva su apellido y que fundó Caspar Faber nueve generaciones antes. El padre de Victoria y Sarah, Anton Wolfgang von Faber-Castell, fue el último presidente de la compañía durante más de 40 años hasta que falleció en 2016, y ahora son sus cuatro hijos -Charles, Katharina y las gemelas- los que se están preparando para dirigir el gran imperio.
La familia también pertenece a la nobleza, por lo que son condes y condesas Faber-Castell. Una dinastía que lleva más de dos siglos y medio de éxito en el mundo de la papelería gracias al trabajo que realizó su familiar a mediados del año 1700 cuando sin ser consciente de ello creó en su taller de Stein, en Alemania, los que serían los lápices más demandados de la historia.
Unos sencillos lapiceros han hecho de oro a la familia. Las mejores amigas de las hijas de Julio Iglesias son la generación actual de la saga, pero mientras ellas estudian en el extranjero, son sus dos hermanos mayores los que dirigen la parte internacional y el Desarrollo Corporativo de la empresa. Sin embargo, las gemelas no están alejadas del trabajo que lleva a cabo su familia ya que son conocedoras de que algún día formarán parte de la directiva del imperio.
Ese bagaje dinástico que está tan ligado al mundo empresarial hace que las hermanas Faber-Castell conozcan el duro trabajo que hay detrás de un negocio y por eso han apoyado a sus grandes amigas Victoria y Cristina Iglesias todos estos meses atrás cuando preparaban el lanzamiento de su propia marca de cápsulas saludables. Pero finalmente, las hijas del cantante han preferido dejar en pausa su proyecto, y ante esa decisión sus íntimas amigas no han dudado en estar a su lado y apoyarlas en este momento.
Las cuatro jóvenes no solo se reúnen en épocas de dificultades, sino que siempre que tienen un hueco en sus agendas se dejan ver juntas disfrutando de lujosos planes a las que solo bolsillos como los suyos tienen acceso. Es habitual verlas tomando el sol en alguna de sus mansiones familiares, cabalgando en caballo por los verdes prados de algún destino paradisíaco o en el front row -primera fila- de algunas de las pasarelas de moda internacionales más importantes. Cuando esto ocurre y las cuatro se juntan, suelen compartir una fotografía del momento en sus redes sociales bajo el llamativo título "Twin conference" (cumbre de gemelas).
[Más información: Las hijas de Julio Iglesias y Miranda derrochan estilo y belleza en el Baile de Debutantes]