La enfermedad de Paloma Lago que le provoca tos, jadeos y opresión en el pecho

Quedan pocas dudas de que el auge de las plataformas audiovisuales ha revolucionado en los últimos años el panorama televisivo español, un ámbito en el que, no hace demasiado tiempo, la oferta era muchísimo más limitada.

Hay que recordar que hasta la década de los 90 Televisión Española contaba con toda una exclusividad que se vio rota con la entrada en escena de cadenas privadas como Telecinco, Antena 3 y, en menor medida, Canal+, ya que su condición de cadena de pago hizo que no entrara en competencia directa con las anteriores. Unos años después, ya entrado el siglo XXI, Cuatro y laSexta se sumaban a la lista, poco antes de que la TDT revolucionara el espectro con los diferentes grupos mediáticos lanzando cadenas temáticas de lo más diverso.

¿Por qué hacemos este recorrido? Este breve repaso histórico sirve para respaldar la sensación de que los presentadores que aparecían en la pequeña pantalla antes de todos estos cambios son recordados mejor por los espectadores. Un ejemplo de ello es nuestra protagonista.

Paloma Lago durante un evento en Mallorca en el mes de agosto. Gtres

Paloma Lago (54 años) comenzó muy pronto su carrera delante de las cámaras, concretamente en 1990. Telecinco, ¿dígame? fue el espacio donde comenzó a labrarse una trayectoria, aprovechando que la cadena de Mediaset daba sus primeros pasos en nuestro país, después de un periodo de éxito en Italia. Con apenas 23 años, Paloma Lago se hizo rápidamente un nombre, aprovechando también las cualidades que le llevaron a formarse como modelo.

Polivalencia

Antes de emprender una nueva aventura, Lago aún tuvo tiempo de vivir la experiencia de trabajar en Tutti Frutti, un programa que forma parte, por derecho propio, de la historia televisiva de nuestro país, entre otros aspectos por la recordada presencia de las Mama Chicho. De ahí da el salto a Antena 3, concretamente a un espacio que presentaba Julia Otero (62), Los cinco sentidos, en lo que sería la antesala de su desembarco en Televisión Española.

En la cadena pública, la modelo y presentadora ferrolana demostró su capacidad de adaptación a varios formatos, llevando las riendas de concursos que daban el pase a Eurovisión Junior o incluso dando las campanadas de Nochevieja junto a Ramón García (60), antes de que Anne Igartiburu (52) se convirtiera en la pareja más habitual del bilbaíno.

Paloma Lago en el 30 aniversario de Sicab. Gtres

Con todo este bagaje, no es extraño por tanto que su nombre haya aparecido en varias ocasiones en la prensa del corazón. En este sentido, su vida sentimental ha tenido diferentes etapas. Aunque se casó con Javier García Obregón, con quien tiene un hijo, quizás uno de sus romances más sonados fue con el malogrado Álvaro Bultó, a comienzos del siglo XXI.

Pero su popularidad no ha servido solo llenar páginas de información del papel cuché. En el 2018 fue, junto a Carmen Machi (58), imagen de una campaña que tenía un lema de lo más descriptivo: 'Que el asma no te pare'. Efectivamente, Paloma Lago está dentro de ese 5% de la población adulta afectada por esta enfermedad crónica, al igual que otro de los famosos que pasó recientemente por esta sección: David Meca (47).

En números generales, se estima que unos cuatro millones de personas en España están diagnosticadas con asma, una enfermedad que suele ser detectada en la mayoría de los casos durante la infancia, aunque también se han dado casos de adultos que no tenían sintomatología previa.

Tos, jadeos, la sensación de opresión en el pecho y fundamentalmente las dificultades para respirar son los síntomas más comunes entre los pacientes, quienes previamente se pueden someter a diversas pruebas para establecer el diagnóstico, desde unas simples pruebas de alergia hasta una radiografía del tórax pasando por una espirometría.

La presentadora sufre asma. Gtres

El origen de este problema de salud no está del todo claro, pero los médicos ponen especial énfasis en evitar los factores que pueden desencadenar su sintomatología: la exposición a determinados ambientes con polvo, el humo del tabaco, las infecciones respiratorias derivadas de los resfriados…

Para su tratamiento, hay que recordar que no existe una pauta que sirva para hacer desaparecer el asma, por lo que se suelen usar inhaladores, nebulizadores y otros medicamentos para mitigar los efectos de la enfermedad, porque como recuerdan los especialistas y la campaña que protagonizó la propia Paloma Lago, se puede llevar a cabo una vida plena a pesar de padecer asma.

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