"Apetecía. Vamos a cortar por lo sano". Con estas palabras Rocío Carrasco (44 años) respondió a Jorge Javier Vázquez (51) cuando apareció en el plató de Montealto: regreso a casa, el programa que sirve de antesala a la segunda parte de su docuserie, En el nombre de Rocío. La hija de 'La más grande' se mostró con un radical cambio de look, que en las últimas horas ha sido muy comentado en las redes sociales y la prensa de nuestro país. El resultado, según los expertos consultados por EL ESPAÑOL, ha sido favorecedor.
Se trata de "un corte pixie con flequillo ladeado que armoniza sus facciones a la vez que ofrece una imagen actual y jovial", explica a este periódico Mónica Delgado, estilista del cabello, asesora de imagen y experta en psicología del color. Jesús Reyes, director de la agencia de prensa CoolHunting Madrid Comunicación y periodista experto en moda, coincide con este análisis y comenta que el look de la madrileña es "una propuesta, en general, bastante acertada".
Aunque en el programa expresó que su corte de pelo solo tenía que ver con las ganas de cambiar, de acuerdo con los expertos, la melena de Rocío Carrasco no es casualidad. Su último estilismo tiene una clara intención que está relacionada con la nueva actitud que desea proyectar, al menos públicamente. En palabras de Jesús Reyes, dejar a un lado su pelo largo, rojizo y ondulado ha sido una forma de "romper con su pasado estético" para "renovar energías, verse bien, guapa y favorecida". En su opinión "lo ha conseguido" con una "nueva apariencia que limpia su imagen, dado a su aspecto desaliñado en sus anteriores apariciones".
Para Mónica Delgado "ha sido todo un acierto" porque ha pasado de proyectar "fuerza y carácter" a "liberación total". La experta asegura que este nuevo estilismo "refleja a una mujer libre de complejos y renovada". De esta manera, Rocío Carrasco transmite "cercanía y accesibilidad". Además, según Jesús Reyes, este "corte de pelo a lo garçon con flequillo lateral podría representar su nueva etapa: más madura, más organizada, más cuidada y más relajada".
Pero el experto no solo hace referencia a su nuevo look, muy aplaudido por los colaboradores del programa de Telecinco, sino también a su outfit. "El chaleco blanco es una pieza que le estiliza la silueta, proyecta una imagen de ella más pura y cercana al público por el poder del color blanco nuclear del diseño y que, sencillamente, le hace más joven y elegante", comenta. De esta manera, Rocío Carrasco ha seguido la misma estrategia -de comunicar a través de su imagen- que comenzó en marzo de 2021, cuando se estrenó la docuserie Rocío: contar la verdad para seguir viva.
En aquella ocasión, en la que se sentó frente a las cámaras para explicar la versión de su turbulenta historia, se mostró con un traje de pantalón y chaqueta fucsia, firmado por Bleis, con el que "dio una imagen de que había resurgido como una flor", explicó en su momento Mónica Delgado. Este estilismo, incluso, incentivó a sus seguidores a crear un movimiento denominado Marea Fucsia, con el que se defiende su imagen y sus argumentos en Internet.
En medio de la emisión de la docuserie, Carrascó se sentó en plató frente a presentadores estrellas de Telecinco con otro llamativo estilismo con el que buscaba proyectar sus sentimientos: traje azul, de pantalón y chaqueta, también de Bleis Madrid. Así, "transmitió confianza y estabilidad por ser un tono que comunica calma y fidelidad que, en su caso, estuvo relacionado a su palabra y a su historia", comentó la experta. Sobre el traje de Zadig & Voltaire blanco y negro con estampado de corazones dijo que la televisiva transmitió "autoridad y libertad". Mientras que con el look amarillo que eligió cuando fichó como defensora de la audiencia de Sálvame dio una imagen de "positivismo, alegría energía y fuerza".
[Más información: 2021, el año en que Rocío Carrasco habló de maltrato: la revolución política y social que provocó en España]
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