Antonio Resines (67 años) ha comenzado a recuperar su rutina después de permanecer ingresado en el Hospital Gregorio Marañón durante más de 40 días por complicaciones por la Covid-19. Aunque todavía arrastra alguna secuela, poco a poco el actor está retomando sus compromisos. El último, con la ciudad de Madrid. 

Este jueves, 12 de mayo, Resines se convirtió en un castizo chulapo y dio el esperado pregón que da el pistoletazo de salida a las fiestas de San Isidro en la plaza de la Villa. 

Acompañado por el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida (47), y la vicealcaldesa Begoña Villacís (44), entre otras autoridades, Antonio Resines se ganó los aplausos del pueblo madrileño. También estuvieron a su lado su mujer, Ana Pérez Lorente (56), y su hijo Ricardo, quienes se convirtieron en sus principales apoyos en los 48 días que permaneció en el hospital.  

El popular intérprete, visiblemente emocionado y con la gorra típica de chulapo, comenzó su pregón recordando al mítico Luis García Berlanga. "Vivir en Madrid es un placer y un lujo" confesó, invitando a la gente a "celebrar por todo lo alto" pero "con cabeza y precaución", las fiestas de San Isidro. "Son días para tirar la casa por la ventana, armar la Marimorena y ser más chulo que un ocho", expresó Antonio Resines, quien también dedicó unas emotivas palabras a los ciudadanos de la capital. 

El cántabro aseguró que lo mejor que tiene Madrid, "sin lugar a dudas", son "los madrileños". "Todos los que hacéis que esta ciudad sea la más sociable y generosa y los que colaboráis a que nadie se sienta forastero, aunque acabe de llegar", añadió.

Para cerrar su discurso y demostrando una vez más su carisma, el protagonista de Los Serrano no dudó en poner a cantar a todo el mundo la canción de la película más emblemática de García Berlanga, Bienvenido Mr Marshall. Así, puso el broche final a uno de los pregones de San Isidro más especiales de los últimos años, con un público completamente entregado al querido actor.

Pero además del cariño de la gente, Antonio Resines recibió durante el acto el 'fonendo de oro' en agradecimiento por su apoyo a la sanidad pública. Un reconocimiento que el intérprete, que no ha dejado de destacar la impresionante labor de los sanitarios de la ciudad desde que salvaron su vida hace pocos meses, y la importancia de dedicar recursos económicos a la sanidad pública, recogió muy emocionado.

El pasado mes de febrero, tras pasar 48 días ingresado en la UCI del Gregorio Marañón de Madrid -23 de ellos, en coma- a causa del coronavirus, el actor recibió el alta hospitalaria. Desde entonces, ha defendido y enaltecido la labor de los médicos y la importancia de la sanidad pública. "Me han salvado literalmente la vida", expresó entonces Antonio Resines. 

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