María Pombo (28 años) tiene motivos para estar contenta. La influencer estrenará a comienzos de 2023 la exclusiva y fabulosa casa que ha comprado para mudarse junto a su marido, Pablo Castellano, y su único hijo en común, Martín.
La vivienda, un impresionante inmueble situado en una de las urbanizaciones más elitistas de la capital, se encuentra en pleno proceso de obras actualmente.
La pareja ha decidido rehacerla para ajustarla al máximo a sus necesidades. Es precisamente Pablo, quien a través de la empresa de reformas de su familia, el Grupo Archarray, se está encargando de la reforma integral de la vivienda, que mantiene la estructura inicial, pero está siendo reformada en su interior por completo. La noticia de la compra la daba la propia María en sus redes sociales.
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La influencer se mostraba feliz y encantada en una de sus primeras visitas a su nuevo hogar. "Nos salió una oportunidad que era imposible de rechazar. Tanto de compra de la casa nueva como de venta de la nuestra. Como sabéis, Pablo se dedica al sector de las reformas y al final casi sin quererlo, encuentra oportunidades y las ve claras. Mientras yo las veo imposibles", confesaba a sus seguidores en su cuenta de Instagram.
El 'chollo', desde luego, no está al alcance de todos los bolsillos. La pareja, que formalizó la compraventa de la misma el pasado mes de abril, ha constituido una hipoteca a favor de una entidad bancaria para sufragar el que será su nuevo hogar. Y el precio de la operación ha sido millonario.
Maria y Pablo han pagado por ella 1,8 millones de euros, cantidad a la que hay que sumar interesas, costas y gastos varios, que suman 300.000 euros más y que hacen que la cantidad final del préstamo al que la pareja tendrá que hacer frente hasta 2062 (40 años) alcance hasta los 2,14 millones de euros.
1.330 metros cuadrados
La propiedad es un casoplón en toda regla. Se trata de un chalet unifamiliar de dos plantas, sótano y baja, de unos 620 metros cuadrados construidos sobre una parcela de 1.331 metros. La casa, cuyas divisiones interiores se han hecho rediseñado por completo, consta, además de varias habitaciones, de vinoteca, una barra de copas, ideal para las reuniones entre amigos, un vestidor propio y una habitación del pánico, nombre que le ha puesto al despacho de su marido.
Además, presentaba otros extras como piscina y depuradora para la misma, un elemento que la propia Marta Pombo mostró en su última visita: casa en ruinas, pero piscina perfectamente lista para un chapuzón. Si todo va bien, la pareja tiene intención de mudarse a comienzos de año. La reforma a nivel estructural ya ha terminado y a partir de ahora el matrimonio se tendrá que poner manos a la obra en todo lo relativo al diseño y el mobiliario.
"Espero poder estar viviendo allí en enero", aseguraba. Para ello la casa es un hervidero de obreros en varias cuadrillas que se afanan en acelerar el paso de las obras para que todo esté terminado en plazo. Si teniendo el contratista en casa las obras no son un problema, tampoco lo es para la pareja deshacerse de su antigua casa.
María y Pablo no tendrán que preocuparse por la venta de la casa, ya que la compra de la vivienda llevaba aparejada la venta del chalet en que habitan en Arturo Soria. Una ventaja que, al parecer, hizo que la pareja se decidiera para dar el salto al vacío y embarcarse en una inversión millonaria.
Su boda e historia de amor
María y Pablo se dieron el 'sí, quiero' en junio de 2019, en una boda multitudinaria celebrada en Cantabria. La influencer se subía al altar con un vestido blanco de corte minimalista y grandes aberturas, acompañado de un abrigo-batín, bajo la firma de Yolancris. Tras cuatro años de intenso amor, la pareja decidía contraer matrimonio. Pombo y Castellano se conocieron gracias a un amigo común que les presentó. En aquel momento ambos estaban saliendo con otras personas, con lo que el encuentro no tuvo mayor relevancia.
Un tiempo después coincidieron en el Master de Tenis y fue en agosto de 2015 cuando surgió el amor entre ellos. En concreto, en uno de los lugares favoritos de la influencer, Santander, el sitio donde veranea con su familia. Allí fue donde Pablo le pidió matrimonio el año pasado y donde decidió casarse.
Así, la pareja llevaba tres años de relación cuando él le propuso casarse, una pedida que llegó por sorpresa. Pombo confesó en su momento que no se lo esperaba, ya que justo en ese momento la pareja se había comprado una casa y habían tomado la decisión de posponer su boda. Pero, ¿quién es Pablo? Este joven es un amante del deporte, que ocupa gran parte de su tiempo libre, tal y como se puede ver en su perfil de Instagram.
El joven empresario tiene una empresa de construcción y reformas con su hermano Jacobo, además de compartir con su ya mujer la firma de moda Tipitent. Pablo ha trabajado puntualmente en diferentes series españolas como El Internado, Centro Médico, Águila Roja o B&B.