Descubrimos la casa de David Cantero: chimenea, estudio de música y cuadros pintados por él mismo
El presentador de informativos vive rodeado de naturaleza en un chalet que mezcla modernidad y traidición. Su mujer, Berta Caballero, es decoradora y eso se nota en el resultado.
David Cantero (61 años) es uno de los rostros más valorados y queridos de los informativos de Telecinco y también tiene mucho éxito en las redes sociales, donde acumula 145.000 seguidores en Instagram. "Creación, periodismo y vida cotidiana", este es el lema de su cuenta. En ella, el periodista y escritor madrileño muestra sus grandes pasiones, momentos íntimos de su día a día y también los rincones más coquetos de su hogar.
Vive en un precioso chalé con jardín ubicado en la localidad de Brunete, a unos 28 kilómetros de la capital. En el interior, la modernidad y lo rústico se mezclan de manera magistral con estancias cálidas y funcionales. Cantero lo ha tenido fácil, pues su mujer, Berta Caballero, es diseñadora de interiores, tiene su propio estudio, y ha personalizado cada zona adaptándola a la esencia de su familia. Ese es precisamente su lema: "Soy especialista en crear viviendas cálidas y acogedoras y ayudo a mis clientes a crear hogares y espacios con alma".
Hay dos cosas fundamentales que no podían faltar en casa de David: una zona dedicada a la música, pues él, apasionado del rock, canta y toca la guitarra eléctrica y un espacio para pintar y colgar sus obras de arte, que adornan muchas de las paredes del inmueble. Esta es otra de las facetas del presentador. "Más de 30 años pintando y todavía esperando una galería dispuesta a exponer", dice en sus redes sociales. Eso sí, Berta no duda en incluir los cuadros de su marido en sus proyectos de decoración, tanto para su propio hogar que han ido reformando, como para el de algún cliente. EL ESPAÑOL ha buceado en sus redes para recopilar los espacios más bonitos del hogar de David Cantero y su familia. Suelos de madera, alfombras, chimenea, estanterías blancas y sofás de vivos colores son algunos de los detalles destacables, sin olvidar los libros y las fotos familiares.