30 años de trayectoria, buen gusto y elegancia en cada pieza que trasciende fronteras, se traduce ahora en un Premio Nacional de Diseño de Moda. Teresa Helbig ha alcanzado el máximo galardón de la industria en España, otorgado por el Ministerio de Cultura y Deporte, dotado con 30.000 euros. El leimotiv de la marca es Una mujer Helbig nunca pasa desapercibida, y ahora, en la modista se aplica más que nunca.
La noticia le tomó por sorpresa. Ella misma cuenta EL ESPAÑOL que se encontraban en casa, comiendo con un amigo, cuando supo que había obtenido el galardón. "De repente me llama un teléfono que no conocía, me empezaron a llegar mensajes por Whatsapp en mayúsculas y negritas de 'coge el teléfono'. Lo cojo y hablamos con el ministro Miquel Iceta. Fue una sorpresa absoluta. Después llamé a la gente del equipo, al taller... locura total", comenta.
Para Teresa es un "orgullo" que se haya puesto en valor su carrera, sus diseños "que perduran en el tiempo", su compromiso por el medioambiente y esa "mirada única" que tienen como marca. "Estamos muy orgullos de recibir este premio y eso nos da las ganas, la energía y el aire para seguir", asegura Helbig en conversación con este periódico.
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Haciendo balance de sus 30 años de carrera, comenta: "Es impresionante los logros que vamos consiguiendo. No había absolutamente nada planeado. Se ha ido construyendo de forma orgánica, creciendo el equipo, creciendo la familia con el mismo ADN que teníamos impreso Teresa madre y yo".
La diseñadora ha recibido el premio por "una larga trayectoria caracterizada por su impulso innovador y la calidad artística de su trabajo a partir de sus orígenes en la empresa familiar". Al frente de la firma han estado dos mujeres, dos Teresas. La madre y la hija. La primera, costurera de oficio y principal impulsora del talento de la modista. La segunda, la galardonada y aprendiz de su progenitora.
Helbig comenzó su carrera en la moda siendo escaparatista en algunas tiendas de Barcelona, su ciudad natal, hasta que finalmente se convirtió en diseñadora de moda, debutando con una pieza que hizo para sí misma, confeccionada con más de 800 plumas, cosida una a una. El éxito fue tal, que a partir de ese momento decidió emprender en la industria del fashion con una pequeña colección. El resto es historia.
Los diseños de Teresa Helbig han conquistado a la reina Letizia (50), a Begoña Gómez (48), a Eugenia Silva (47) o a Úrsula Corberó (33). Pero también a estrellas internacionales, como Halle Berry (56) o Zendaya (26). La diseñadora, además, es una habitual en la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid y en alfombras rojas como la de los Premios Goya.
Una de sus últimas hazañas como diseñadora ha llegado de la mano de Iberia. Teresa Helbig se ha convertido en la primera mujer en diseñar los últimos uniformes de la tripulación de la aerolínea, consiguiendo que su sello lo llevan más de 6.000 empleados por todo el mundo. Antes lo hicieron Pedro Rodríguez, Pertegaz, Elio Berhanyer, Alfredo Caral y Adolfo Domínguez.
Helbig se caracteriza por crear prendas únicas. Entre sus colecciones no hay vestido igual a otro. Eso sí, todas siguen su línea fina, artesanal y de calidad, resaltando entre tantas propuestas.
El jurado del Premio Nacional de Diseño de Moda, de hecho, ha destacando "su labor en aras de la formación de nuevos profesionales. La relevancia internacional alcanzada por su obra, su continuo diálogo con otras artes e industrias culturales, así como, especialmente, su trabajo de investigación, actualización e incorporación de la artesanía a las líneas más vanguardistas del diseño español".
La catalana se ha hecho eco de estas palabras en su perfil de Instagram, confesando su felicidad y agradeciendo a aquellos que cada día hacen posible lo que, 30 años después, sigue siendo "un sueño". Su galardón también lo celebran públicamente algunas de sus musas, y ahora amigas. "Que merecido Premio Nacional de Diseño de Moda. Te quiero y adoro, baby", le ha escrito Eugenia Martínez de Irujo (54).
Las redes sociales son su principal medio. En Instagram atesora más de 160.000 seguidores que son testigos de sus maravillosas creaciones y en ocasiones, de su pequeño espacio personal. Aunque es reservada con su vida privada, buceando en su cuenta se encuentran imágenes junto a su madre y su hija Zinash, a la que adoptó en Etiopía. En estos post, el valor de la maternidad y el poder femenino juegan un rol fundamental, dejando al descubierto el otro lado de Teresa Helbig, más allá de la moda.