José Luis Moreno reaparece tras la muerte de Mari Carmen y sus muñecos: "Voy a hacerle un homenaje"
El ventrílocuo ha roto su silencio tras dos años alejado del foco. Moreno se lamenta de que su amiga no recibiera un reconocimiento antes de morir.
22 junio, 2023 11:34Si hay un profesional de la televisión y el espectáculo que conoció realmente -y en la intimidad- a la ventrílocua Mari Carmen y sus muñecos, ése fue José Luis Moreno (76 años). Los dos humoristas han trabajado juntos, codo con codo, durante décadas y la televisión no se entendía sin su presencia. Demasiadas vivencias y horas de grabación en la pequeña pantalla forjaron una bonita amistad. Incluso, protagonizaron un discreto romance.
José Luis vive esta pérdida con tristeza, pero sabe que su amiga no quería lágrimas ni lamentaciones. Por eso, sólo desea el productor televisivo honrarla con un gran homenaje. Así lo ha desvelado Moreno en conversación con Semana: "Yo ya estoy preparando un homenaje con horas y horas de sketches suyos, a cada cuál mejor".
En este punto, José Luis reivindica que los reconocimientos se realicen con el personaje aún en vida: "Hay una cosa que quiero decir. Tengo relación -y digo tengo en presente- con Silvio Berlusconi. He trabajado muchos años con él. Cuando he visto el gran despliegue que le han hecho, digo 'eso lo deberíamos hacer un mes antes de morir'. El no poder vivir ese calor, esa ternura...".
Ligeramente emocionado, José Luis reflexiona: "Mari Carmen era de una ternura... y recibía el cariño y los detalles con una felicidad y un agrado. Con un deseo de devolvértelo. Ha hecho muy feliz a sus amigos y a su familia. Es una pena que no vean los homenajes y puedan decir 'pues ya me puedo morir feliz'".
En opinión del también ventrílocuo, Mari Carmen y sus muñecos no murió apenada ni nostálgica por no trabajar en televisión: "Ella ha hecho unas declaraciones últimamente diciendo que la televisión la había olvidado, pero ella estaba demasiado llena. ¡Se le ocurrían cosas para hacer a diario! Mari Carmen no era nada nostálgica, vivía en un presente en plenitud. No creo que viviera en nostalgia, no le pegaba vivir en el pasado".
De hecho, en palabras de Moreno, "nunca se retiró. Lo que debemos hacer todos es resucitarla en el presente a través de todo lo maravilloso que ha hecho. Mis programas con ella tienen una actualidad que parece que los ha grabado ayer; ése es el talento. Por favor, cada vez que penséis y habléis de ella, la sonrisa, que es la tarjeta de visita de su vida".
El dolor del hijo de Mari Carmen
Abatido tras el fallecimiento de su madre, acaecido el pasado 15 de junio -tras sufrir un infarto a las puertas de su domicilio en Tenerife-, Miguel Almanzor (42) ha abandonado la capilla ardiente, este pasado miércoles 21, para atender a los medios de comunicación presentes en su último adiós.
Muy entero, el hijo de la artista ha reconociendo que tanto él como el resto de su familia todavía están "en shock" tras su repentina muerte: "Nunca se me había ido un ser querido tan cercano y creo que lo peor está por venir, pero muy mal". "Te levantas, pasas de la tristeza más absoluta y la impotencia a la alegría porque siento a mi madre conmigo, siento a la mejor versión de mi madre conmigo, a esa Mari Carmen de los 80. Sientes a la Mari Carmen joven a mi lado en todo momento", ha confesado.
Además, y aunque es consciente de que "puede parecer una tontería", Miguel ha revelado en los últimos días ha vivido varios episodios cercanos a lo 'paranormal'. "Mi madre siempre me decía que cuando se marchase, 'estate muy pendiente de las señales', y os puedo asegurar que me han llegado señales por todos lados. No quiero especificaros cuáles son. Igualmente me estoy volviendo completamente loco, pero por eso pasas de la alegría a la tristeza porque siento que está conmigo y que va a estar conmigo siempre", ha añadido.
Remacha Miguel: "Ahora mismo daría lo que fuera no porque me dijera te quiero, sino que viniera y me echara la bronca con algo. Que me dijera, 'Miguel, tienes que hacer esto así'. Hasta eso daría, que se preocupara por mí tanto como se preocupaba hasta el límite. Nada importaba y en esos pequeños enfados que hemos tenido ella tenía toda la razón y yo estaba equivocado".