Los ladrones se ceban con los famosos: del anillo de cuatro millones de Kardashian a los Cartier de María del Monte

El reciente asalto en la mansión de Miguel Bosé (67 años) a manos de 10 encapuchados y el atraco a Mónica Pont (52) -ambos en Ciudad de México- ha puesto de relieve hasta qué punto los ricos y famosos tienen las medidas de seguridad necesarias. El cantante presentó hace unos días la denuncia formal a la Fiscalía General de Justicia ya que quiere evitar a toda costa que sus hijos Diego y Tadeo (11) vuelvan a sufrir algo tan duro como ser maniatados durante un par de horas.

A la intérprete catalana y a su hijo Javi (19) les quitaron dos Rolex de 20.000 euros cada uno y el conserje de su edificio resultó herido grave de un disparo, por ello, a través de su Instagram quiso "advertir e intentar evitar que cualquier persona que llegue a este país con relojes, joyas o cambie dinero en efectivo en las casas de cambio del aeropuerto, no lo haga". Además, reiteró que "existe actualmente una banda en el aeropuerto de la CDMX que te sigue hasta tu casa y no tiene reparos en dispararte para robarte lo que lleves encima. Gracias por vuestro apoyo y por favor si pueden recen por la vida de Manuel, mi portero, que en un acto de heroísmo se jugo la vida para intentar protegernos".

A raíz de estos casos, EL ESPAÑOL rescata algunos robos y atracados perpetrados a deportistas, actores o socialités en diferentes partes del mundo.

[Miguel Bosé y dos de sus hijos, asaltados a punta de pistola en su casa de México por ocho ladrones]

Miguel Bosé, en una imagen de archivo. Gtres

Philippe Junot (83), ex primer esposo de Carolina de Mónaco que ha recuperado la actualidad en nuestro país al ser el yerno de Álvaro Falcó (39), primo carnal de Tamara (41), se encontraba en la mansión de un amigo en Saint Tropez cuando en el 2008 causando unos encapuchados entraron en la propiedad. Los ladrones usaron un tipo de gas que adormeció al servicio y el ilustre huésped al que sustrajeron dinero y joyas por valor de alrededor 35.000 euros. En la misma localidad elitista, el piloto Jenson Button (43) y su esposa Jessica alquilaron una villa donde unos ladrones introdujeron un gas somnífero en los sistemas de aire acondicionado para campar a sus anchas. Se llevaron la sortija de compromiso de Jessica valorado en 350.000 euros y pertenencias por otros 100.000 euros.

En la primavera de 2022, al piloto llamado Charles Leclerc (25) se la liaron gorda. Un fan se acercó para pedirle un autógrafo en la Dársena de Viareggio (Livorno, Italia) y aprovechó para robarle un reloj Richard Mille 67-02 personalizado valorado en 300.000 euros.

Los futbolistas destacan por hacer ostentaciones innecesarias. Sin embargo, algunos más discretos también han sido víctimas de robos. En 2018, Shakira (46) y Piqué (36) estaban de viaje cuando varios asaltantes entraron por una de las ventanas de a mansión de la ex pareja en Esplugues de Llobregat (Barcelona) donde se llevaron varios relojes del ex futbolista y joyas de la cantante. No hubo violencia, pero tanto Piqué como Shakira se asustaron muchísimo porque en ese momento dormían en el hogar.

¿Por qué siempre roban a José Luis Moreno?

Shakira y Piqué en 2016. Gtres

Ese mismo año, otro colega del Barça, Jordi Alba (34) se encontraba durmiendo con toda la familia en su domicilio del exclusivo barrio de la Bonanova cuando unos desalmados se llevaron objetos por valor de 400.000 euros tal y como denunció el deportista ante los Mossos. En 2019 los perjudicados fueron el actual jugador del Betis Isco Alarcón (31) y su pareja, la actriz Sara Sálamo (31), pero no se supo a ciencia cierta lo que se llevaron. Unos meses después, la mansión de la Moraleja de Casemiro (31) fue desvalijada mientras él se encontraba jugando el derbi mientras su mujer y su hija que no fueron lastimadas.

Entre todos, el más mediático a nivel mundial es David Beckham (48), quien en la primavera del año pasado vivió una de sus peores pesadillas cuando en la mansión familiar de 36 millones de euros ubicada en la zona londinense de Holland Park, alguien entró para llevarse varios accesorios de lujo, objetos electrónicos y prendas de alta costura. El drama fue que tanto el deportista, como su esposa Victoria (49) y su hija Harper (12) se encontraban durmiendo, pero fueron alertados por su hijo Cruz (18) que al llegar de fiesta se dio cuenta que la habitación de invitados estaba revuelta.

En 2016 Kim Kardashian (42) acudió a la Semana de la Moda de París donde alquiló un apartamento y contrató a un equipo de seguridad. Las pistas que dio con fotos y vídeos sirvió para los asaltantes mapearan la vivienda. Lo curioso de este delito es que los asaltantes pertenecían a la 'banda de los abuelos' ya que los integrantes tenían entre 60 y 72 años. La empresaria entregó a los ladrones un anillo con diamante de 15 kilates valorado en más de cuatro millones de euros.

[El ladrón que atracó a Kim Kardashian en París: "No hubo necesidad de amenazar. Ella colaboró"]

Kim Kardashian en la Fashion Week de París. Gtres

Entre 2008 y 2009, un grupo formado por seis adolescentes denominados Bling Ring -Sophia Coppola llevó la historia a la gran pantalla- se dedicaron a robar en las residencias de sus ídolos. Entre sus víctimas destacaron Paris Hilton (42), Lindsay Lohan (37) y Orlando Bloom (46). La ex heredera del imperio hotelero sufrió un robo de joyas por valor de 1,5 millones de euros en su residencia de Sherman Oaks, ubicada en el californiano Valle de San Fernando, que un año después recuperó. En el caso de Lohan, en el 2009 sufrió dos robos. El primero no tuvo consecuencias negativas, pero en el segundo se llevaron la caja fuerte que contenía dos relojes de alto valor económico, así como ropa, zapatos y bolsos. Se olvidó de conectar la alarma. Cuando Orlando Bloom salía con Miranda Kerr (40), la pareja residía en una casa en Hollywood Hills donde los amantes de lo ajeno se llevaron joyas y relojes con un valor estimado de 500.000 dólares. La pareja pecó de incauta porque se dejaron abierta una venta. Ninguno de los dos se encantaba en el domicilio.

Entre las actrices despistadas están Hilary Duff (35) y Lindsay Lohan (37) quienes con las prisas se olvidaron de conectar las alarmas. En 2017, la protagonista de La nueva cenicienta (2005) se encontraba de vacaciones en Canadá cuando le sustrajeron 20.000 dólares de su residencia en Beverly Hills. Y en el caso de la actriz de Tú a Boston y yo a California, en el 2009 sufrió en menos de tres meses dos robos en su casa de Hollywood Hills. En el último de ellos arrancaron la caja fuerte de la pared, robaron diferentes prendas y complementos de marca, joyas y varios relojes.

En el ámbito de la moda, uno de los robos mejor estudiados lo sufrió Kate Moss (49), quien en el momento de lo sucedido se encontraba durmiendo al igual que su novio y su madre. De su domicilio londinense se llevaron varias piezas de arte, entre ellas, un grafito de Banksy valorado en unos 100.000 euros.

María del Monte con su mujer, Inmaculada Casal. Gtres

En nuestro país, el último acontecimiento ha tenido como víctima a María del Monte (61) y su esposa, Inmaculada Casal (59) que en la madrugada del 25 de agosto sufrieron un robo por parte de varios encapuchados en su casa sevillana de Ginés. De momento solo se sabe que se llevaron dinero. La Guardia Civil sigue investigando el caso.

Por cierto, tampoco hay que olvidar el violento robo que José Luis Moreno (76) vivió en sus propias carnes en 2007 cuando los ladrones se liaron a golpes con él en su mastodóntica mansión de Boadilla del Monte (Madrid). Durante las declaraciones a la policía y la prensa no dudó en dejarse retratar con la cara llena de hematomas y afirmó que "entró un encapuchado con una pistola pequeñita, luego entró el siguiente y llevaba una palanca negra, luego vino otro... Me lancé hacia ellos y empezó un zafarrancho, me dieron con una barra y un hachazo, lo único que me quedaba era salvar la vida como pudiera, me agarraron como un trapo y me llevaron donde sabían que estaba la caja fuerte. Fueron 8 minutos. En 10 abrieron la caja y se fueron". Curiosamente, en 1999 sufrió otro robo donde los cacos se llevaron algo más de 180.000 euros.