Natalia Rodríguez (41 años), concursante de la primera edición de Operación Triunfo que compitió contra rostros conocidos como Chenoa (48), David Bisbal (44), Rosa López (43) o David Bustamante (42), se siente renovada. La cantante está en su versión 2.0 y se siente más sexy, salvaje y fiera que nunca.
La compositora de Sanlúcar de Barrameda, Cádiz, ha abrazado a su nuevo yo y se encuentra de estreno con su nuevo single Nadie más, lanzado al mercado este pasado viernes, 26 de abril. Seis días antes comenzó su gira por España, una nueva etapa que afronta con gran ilusión.
EL ESPAÑOL ha charlado con la popular Natalia en la terraza de un conocido hotel de Madrid con motivo de su nueva canción sobre el amor, el desamor, la música, sus mayores miedos y fortalezas y la maternidad.
Cuénteme todo sobre 'Nadie más'.
Nadie más es una canción mía. Aunque no tenga el perfil, yo soy cantautora desde toda la vida, pero siempre me ha gustado hacer música más movida, bailable y comercial. Quería que el estribillo fuera instrumental y potente para que la gente la disfrutara escuchándola. Entonces he metido en esta canción todos los ingredientes para que a la hora de hacerla en directo explotara. Tiene una fusión de sonidos espectacular de pop, dance, techno, bachata, afro... Hablo sobre que no creo en los cuentos de Cenicienta, que mi corazón se ha congelado y que me quiero proteger de la gente que me haga daño. Entonces me refiero a que nadie más va a hacerme sufrir, porque ya me lo han hecho muchísimo, y ya va siendo hora de estar bien conmigo misma.
¿No hay nadie más que Natalia?
Exacto, nadie más. Es que si uno no está bien con uno mismo, el resto no vale para nada.
¿Por qué eligió esa portada del single?
Quería una portada en la que saliera mi imagen como más salvaje, en movimiento, con tonos metalizados... Como una fiera, una salvaje, y creo que esa portada te lo da todo. De hecho en mi videoclip salgo con cadenas y haciendo coreografías con ellas y bailando dentro de una copa de champagne.
Empezó con su gira musical el pasado 20 de abril.
Tengo una gira con un show renovado. Voy a llevar un dj y voy a mezclar música y canciones de los años 90 y de los 2000 con mis canciones. Durará poco más de una hora donde no parará la música y donde será una fiesta continua y se meterá mucha caña y mucho baile, que para eso entreno todos los días, para estar en forma y hacer un show. Yo de hecho, en los conciertos puedo llegar a perder un kilo y medio, pero acabo agotada
Su sueño de ser cantante se cumplió hace ya 23 años. ¿Qué sueños le quedan por cumplir?
Antes era como más soñadora. Ahora he aprendido a vivir el presente porque me he dado cuenta de que cuando empezaba a soñar o a pensar en el futuro me creaba muchísima ansiedad. Quiero vivir el presente, disfrutar de lo que me está pasando. Estoy muy contenta con lo que he vivido y con lo que he conseguido. Vivir 23 años de la música no es nada fácil y yo lo he conseguido sola. Entonces yo lo que quiero es seguir viviendo de la música hasta que mi público quiera y hasta que a mí me apetezca. Y el día que se acabe, pues ser feliz por todo lo que he hecho, no me arrepiento de nada de lo que he hecho. Y he de confesarte una cosa, cuanto más años voy cumpliendo, más contenta estoy, más segura me siento en los escenarios, menos vergüenza tengo y más sexy y salvaje me siento a mis 41 años.
¿A qué cosas ha tenido que renunciar por la música?
A pasar tiempo con mi familia, a ver crecer a mis sobrinos, a ver envejecer a mis padres, y a enfrentarme a una vida solitaria. La música es una vida muy solitaria en la que terminas un concierto, que tienes una adrenalina por las nubes, y te metes en una habitación sola a las 04:00 horas y quieres compartirlo con alguien, y no tienes a quien llamar porque la gente está dormida. Y entonces es un mundo muy solitario.
¿Qué le inspira más, el amor o el desamor?
El desamor, el amor me cuesta mucho más. Cuando escribes canciones de desamor la gente se siente más identificada. De hecho, las grandes canciones son de desamor. Mis canciones son autobiográficas y casi siempre las de desamor van dedicadas a mis exparejas.
¿Le han roto más el corazón a usted o usted ha roto más corazones?
Me lo han roto más a mí por desgracia. Soy una persona que si empiezo con alguien siento que es para toda la vida. Soy muy antigua. Me han roto el corazón muchísimas veces, la última vez que me rompieron el corazón me lo congeló, y me está costando descongelarlo.
¿Cómo afronta una ruptura?
Yo solamente espero que no me lo rompan más, porque yo lo paso realmente mal. He hecho una grandísima terapia por si me vuelve a pasar no estar tan mal. Yo nunca supe lo que era el dolor del corazón y de llorar sin que no fuera dolor físico. No se lo deseo a nadie. No me gusta que me mientan ni que jueguen conmigo, lo llevo muy mal.
¿Cómo se encuentra ahora su corazón?
Soy humana y seguro que me vuelvo a tropezar con la misma piedra. Soy muy enamoradiza y tengo muchas ganas de enamorarme y de conocer gente. No me voy a cerrar al amor porque soy una tía valiente, y si tengo que besar a muchos sapos, los besaré hasta encontrar a la persona que esté a mi lado y que quiera formar un equipo de verdad. Y mira, hay una pregunta que agradezco que ya no hagan tanto y es sobre la maternidad. A mí siempre me han gustado muchísimo los niños, pero también mi independencia y mis ratos de soledad. Un niño te da muchas cosas bonitas, pero también te quita una gran parte de tu vida y de tu independencia. A día de hoy yo no tengo ese instinto maternal, de hecho lo digo abiertamente porque creo que es una cosa que se puede decir: yo tengo mis óvulos congelados. Todavía estoy en una edad fértil para poder ser madre si quisiera tomar la decisión, pero ahora no es una cosa que tenga en mente.
¿Cómo lleva que sea una pregunta que, en su mayoría, vaya dirigida sólo a mujeres?
Nunca nadie sabe en qué momento está esa persona. A lo mejor yo he querido ser madre y no he podido, o he tenido muchos abortos, o soy estéril, y te hacen esa pregunta y te puedes derrumbar. Yo porque te he sacado yo el tema, pero hay mujeres que lo pasan realmente mal porque quieren ser madres y no pueden. De hecho, estamos retrasando tanto la maternidad que por eso la natalidad está bajando tanto en España. Pero tampoco tenemos facilidades a nivel económico ni de independencia. Yo no quiero ser madre y estar viajando todo el día con un niño enganchado, pero qué ayuda tengo yo siendo autónoma. Cómo me enfrento yo a ser madre, quién me cuida un hijo, y si quiero ser madre soltera cómo hago yo. Te lo tienes que plantear muy bien.
¿Quién es Natalia más allá de los escenarios?
Una persona muy de mi casa, muy apañá, muy resolutiva. Soy totalmente lo opuesto a lo que se proyecta de mi imagen. Muy normal, muy cocinillas. Soy muy ama de casa y me encanta.
Muchos de los que empezasteis en 'OT' os hicisteis un nombre, pero es muy complicado seguir triunfando en esta industria. ¿Cuál es la fórmula para hacerlo?
Hay gente que me pregunta que si sigo cantando, y eso es porque no me sigue en redes sociales. A día de hoy la radio apoya a cuatro artistas y en la tele ya no hay programas donde cantar. Entonces la única herramienta son las redes. Yo no he parado de trabajar en 23 años. ¿Cómo se consigue eso? Invirtiendo, creyendo en ti, no quejándote y celebrando todo lo bueno que te llega.
¿Le afecta que la gente le conozca como "Natalia la de OT"?
A mí me encanta y no me importa. El apellido OT es uno del cual yo me siento muy orgullosa ya que es un programa que sigue triunfando. Lo único de lo que me arrepiento es de no haberme puesto nombre artístico, si lo hubiera sabido me hubiera puesto Tali. Chenoa fue lista y lo hizo, pero yo no tenía ni idea.
Su relación con ella y con Gisela estos años se ha afianzado mucho. ¿Ha habido altibajos en su amistad?
Es una amistad irrompible, o eso espero. Después de 23 años seguimos ahí, al pie del cañón, nos queremos, nos entendemos y nos apoyamos. Sabemos como somos cada una de nosotras, lo bueno y lo malo, y nos aceptamos. Operación Triunfo tuvo algo muy bonito y es que creó una hermandad irrompible. Si ahora mismo aparece Rosa López, David Bustamante, Manu Tenorio o quien sea, yo me levanto y les doy un abrazo, porque lo que yo he vivido con ellos no lo sabe nadie y eso va a ser irrepetible. Fue la experiencia más impactante y espectacular de mi vida.
¿Ha conocido al bebé de Gisela?
Sólo por fotos. Ella está en Barcelona dedicándole tiempo y está muy enamorada del pequeño.
Sobre esos compañeros, hace un mes que se cumplieron tres años de la pérdida de Àlex Casademunt...
Aún no me lo creo. No lo asimilo. Será una tontería, pero yo creo que está en Barcelona y vive lejos. Pienso que él está allí. Yo no acepto que no esté incluso después de tres años. Era mi hermanito y me ayudó muchísimo. Éramos dos buscavidas y a quienes nos gustaba mucho este trabajo. Yo me sentía muy identificada con él.
¿Cuál es su mayor miedo?
Antes era la tía más miedosa del mundo. Tenía miedo a la soledad, al fracaso, a todo. Vivía en una continua ansiedad e incertidumbre. Lo pasaba realmente mal y esos grandes miedos me lo he ido rebajando y ya no soy tan miedosa. Ahora voy a vivir la vida como si fuera el último día, voy a decir a las personas que quiero que las quiero y voy a hacer lo que realmente quiera, sin hacerle daño a nadie, teniendo empatía con todo el mundo. Lo que sí me dan miedo son dos cosas: una la vejez porque se apalea muchísimo a las mujeres y la gente se ve en la libertad de decirte lo que tienes qué hacer. Y a la otra a que la gente me haga daño con los comentarios sin tener un poquito de empatía. Eso es lo que me da miedo, porque a mí me afecta. Me han llegado a hacer mucho daño.
¿Y su mayor fortaleza?
Soy una tía que cuando estoy en el hoyo no sé cómo lo hago, pero cuanto más abajo estoy es cuando más energía saco para resurgir de las de las cenizas como el ave fénix y salir de los momentos más difíciles. Soy una persona que no pierde la esperanza y que intento resurgir siempre.
¿Quién es su mayor apoyo?
Mi madre. Es mi referente. Nunca pierde la esperanza y es donde yo me quiero reflejar toda mi vida. Tiene 71 años, es guapísima, es divina y tiene una energía, una vitalidad y unas ganas de comerse siempre el mundo... Que qué alegría haber sacado eso de ella. Soy mi madre dentro de 30 años.
¿Cuál es su colaboración de ensueño?
Siempre he sido muy fan de Luis Fonsi. Y ya, si me dices de soñar, bueno, pues Beyoncé (se ríe), pero es algo impensable. Me parece una mujer de otro planeta. Es un espejo donde poder mirar y copiar. Ella y Jennifer López.