Isabel Preysler no deja de sorprender. A sus 73 años la reina de corazones demuestra que es incansable y que la edad no es un impedimento para reinventarse. No lo necesita, pero le gusta estar vigente. A la socialité le cuesta resistirse a nuevos proyectos y suele atreverse con facetas que son propias de un target más joven. La última, relacionada con el sector influencer, un trabajo que sus hijas Tamara Falcó (42) y Ana Boyer (35) conocen muy bien.
La firma de gafas Multiópticas acaba de ficharla como embajadora de su nueva campaña, de la que también forman parte el actor Miguel Herrán (28), la tiktoker Lola Lolita (22) y el youtuber Plex (22). Sin embargo, el cambio que ha dado Preysler en redes viene siendo progresivo. Comenzó el pasado enero, dos semanas después de que Pablo Motos (58) la entrevistara en El Hormiguero, y ha sido todo un acierto.
"Isabel Preysler encaja perfectamente en este mundo nuevo en el que la estarían ayudando a crecer", explica a EL ESPAÑOL Arantxa Pérez, de la agencia PR & MANAG y experta en marketing de influencers. En su opinión, es probable que la socialité este trabajando con un equipo profesional en el sector.
Preysler habría debutado como influencer para "sentirse realizada" y acercarse a un área que bien conocen sus hijas, tal y comenta la experta en redes. Pérez recuerda que la reina de corazones "no necesita visibilidad pública" y que su decisión estaría relacionada, sobre todo, a sus ganas de "sentirse parte de la sociedad actual".
Con respecto a su trabajo con Multiópticas, la alianza se perfila como un ganar-ganar. "Es muy bueno para ambas", comenta Arantxa Pérez en su conversación con este medio. La experta explica que de esta forma Isabel Preysler "se mete de lleno en la publicidad en redes sociales" y lo hace "por la puerta grande".
"Es una marca que la renueva, la rejuvenece", asegura la experta en redes mientras recuerda que precisamente de Isabel Preysler siempre se ha dicho que goza del secreto de la eterna juventud. Para la firma de gafas también resulta enriquecedor, pues "demuestra que su público es universal y que se trata de una óptica a las que todos tienen acceso". Para argumentar este punto, Arantxa pone el foco en la diferencia de edad entre la socialité y los otros tres embajadores de la nueva propuesta de la marca, MO Bouquet, que se presentará ante la prensa este próximo jueves, 9 de mayo.
Por cuarto año consecutivo, la firma prepara su evento anual. Esta vez, enfocado en el universo y la naturaleza de las flores, destacando su capacidad de renacer con cada temporada. Esta última, una premisa que encaja a la perfección con la imagen de Isabel Preysler.
La hispanofilipina, como el resto de embajadores, representa a su forma "la naturaleza de florecer", tal y como expone la marca. En su caso, esa idea de "mantenerse fiel a sí misma sin dejar de lado probar cosas nuevas es no renunciar a nada".
Con esta campaña, analiza Arantxa Pérez, la firma también estaría promoviendo la idea de que la moda "va de gustos y no de edad". Contar con una aliada como Preysler, además, es una forma de aumentar la "autoestima" y el "autoconomiento" de su público.
Sobre la cantidad de dinero que podría cobrar con trabajos como éste, la experta en redes sociales desliza a este medio que "los honorarios son incalculables". Como en cualquier figura, "dependerá del tipo de contrato que haya firmado". Pero en el caso de Isabel Preysler hay que tener en cuenta que su caché abarca mucho más. "Va más allá de las típicas franjas establecidas", pues en su caso se habrían fijado "beneficios que trascienden lo económico".
Sus próximos pasos como creadora de contenido seguirían la misma línea que han trazado sus hijas, explica Arantxa Pérez. La experta en marketing de influencers asegura que Isabel Preysler, al igual que Tamara Falcó, filtrará las marcas con las que que quiera trabajar. La madre de Enrique Iglesias (48) no necesita tener mayor visibilidad y esta nueva faceta, concluye la profesional en redes, es una forma de ser productiva.
Para Jordi San Ildefonso, Social Media Manager, es también una manera de "conectar mucho más con sus seguidores, mostrándose auténtica y accesible". Haber fichado por Multiópticas, además, le permitirá "llegar a un público mucho más joven" y convertirse en el reclamo de marcas que apuestan fuertemente por las redes sociales y que necesitan "perfiles que transmitan credibilidad".
"Además de los contratos con las firmas con las que lleva trabajando desde hace años, le van a surgir nuevas oportunidades con marcas más frescas e innovadoras. Sin duda, Isabel Preysler ha sabido reinventarse y no quedarse con las firmas de siempre. Ha entendido que adaptarse a los cambios es el camino", matiza Jordi Sanildefonso con respecto al futuro prometedor de la socilaité en esta nueva etapa de influencer.