Durísimo golpe para Olga Moreno (48 años) tan sólo unas semanas después de anunciar su vuelta a televisión como concursante del nuevo reality Supervivientes All Stars. La exmujer de Antonio David Flores (48) ha recibido este pasado domingo, 9 de junio, un mazazo dolorosísimo al conocerse la muerte de su madre, Rosa Obrero, a los 82 años, a causa del cáncer que padecía.

Un revés del que, de seguro, le será complicado reponerse y que, con total seguridad, condicionará su concurso. Este mismo domingo día 9 Moreno se despedía de su madre después de muchos años de amor, compañía y cariño en una relación intachable como madre e hija.

Intentando disfrutar de esta nueva etapa de su vida alejada del foco mediático, Olga que querido llevar esta noticia en la más estricta intimidad y es que, por el momento, no ha querido compartir con sus seguidores la triste noticia de la pérdida de su madre que hacía muchos años que luchaba contra una larga enfermedad.

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"Hoy me ha pasado algo muy triste. Me han dicho una cosa de mi madre y estoy un poco emocionada. Está bien, pero podía estar mejor. Es una mujer fuerte y luchadora, tiene un problema que está a la orden del día, pero lo va a superar", reconoció la propia Olga durante una entrevista en televisión con Toñi Moreno (51).

"Lo superó, pero me marcó. Le cortaron un pecho, pero ella nos daba fuerzas. Es una mujer muy alegre y llena de vida", reveló entonces Olga rota de dolor. "En esta etapa me está ayudando muchísimo pero yo tampoco quiero preocuparla con mis cosas", agregó. 

Rosa Obrero junto a su hija, Olga Moreno.

Hace tan solo unos meses, en marzo, Olga recurría a su cuenta de Instagram para felicitar a su madre en el día de su cumpleaños. La homenajeó con unas palabras y unas fotografías llenas de cariño y admiración hacia la mujer que le dio la vida y la ha acompañado en lo bueno y en lo mano durante todo este tiempo.

"A la mujer que me enseñó el valor de la vida, que cada día sea un reflejo del amor y la felicidad que nos has dado. Gracias por cada sonrisa, cada lección y cada momento. Hoy celebramos el maravilloso regalo que es tu vida. ¡Feliz cumpleaños!", escribió.

Intentando llevar estos delicados momentos con discreción, Olga y sus hermanos se han despedido de su madre, Rosa Obrero, con el apoyo y el cariño del resto de la familia que no los han dejado solos en ningún momento en esta triste despedida.

Rosa siempre se ha sentido muy orgullosa de su hija Olga, cuando ésta dio el salto a la televisión. Obrero, incluso, intervino telefónicamente en el espacio Supervivientes 2021, para insuflarle ánimo a su hija. "Sigue luchando en las pruebas y disfruta de ese paraíso que tienes, que el tiempo se acaba. Aguanta todo lo que puedas. Aquí estamos todos orgullosísimos de ti. Eres una súper superviviente diez", aseguró Rosa.

Además, durante aquella breve intervención telefónica Rosa Obrero se mostró muy orgullosa de su hija: "Todo el mundo, hasta a papá en la frutería, le dicen 'vaya hija que tienes'". Aprovechó para tranquilizarla sobre su estado de salud: "Toda la familia estamos bien. Yo también". 

Olga, destrozada

Olga Moreno, este lunes, 10 de junio, totalmente destrozada. Europa Press

Olga y su familia, una piña en este doloroso trance, han dado el último adiós a Rosa Obrero este lunes, 10 de junio, a las 8:00 horas en el Tanatorio de la S30 en Sevilla, ciudad natal de la ganadora de Supervivientes 2021. 

Unidos y completamente destrozados, la ex de Antonio David, su padre, Mariano Moreno, sus hermanos -Olga tiene 1 hermano y 4 hermanas, Silvia, Raquel, Rosa y Aranza-, y otros miembros de su familia, encabezaban el cortejo detrás del coche fúnebre camino al crematorio, en el que han despedido definitivamente a Rosa Obrero en la más estricta intimidad.

Abatida y con una gorra para intentar pasar desapercibida, la televisiva no se separó de su padre en ningún momento, agarrándolo del brazo con gesto protector en estos momentos en los que ha tenido que decir adiós al gran amor de su vida.

Sacando fuerzas de flaqueza para saludar con un gesto de tristeza a la prensa, Olga abandonaba el tanatorio con un ramo de flores en la mano y, devastada, se abrazaba a sus hermanas demostrando que son una auténtica piña tras perder a su gran pilar.

Un adiós tan íntimo que ni siquiera la pareja de la sevillana desde hace dos años, Agustín Etienne, ha estado presente. Tampoco Antonio David Flores, con el que se especula que habría tenido un fuerte enfrentamiento recientemente por su decisión de mudarse a Madrid con su novio.