Los nombres de Gabriela Guillén (32 años) y Bertín Osborne (69) se repiten sin cesar en los platós de televisión y en distintos medios de comunicación desde hace meses, con especial intensidad desde que el pasado 12 de junio la expareja decidiera emitir un comunicado.
En el escrito, el cantante se adjudicó la paternidad del vástago de Gaby, como la conoce su entorno, y ambos parecían llegar a un acuerdo privado. Atrás quedaban meses de tiranteces, de distanciamiento y de sólo saber el uno del otro a través de abogados y mediadores.
Tras este entente, EL ESPAÑOL pudo conocer, hace unos días, que Gabriela está "en paz" y se muestra "conciliadora". Nunca ha buscado ningún tipo de interés económico en Bertín Osborne, más allá del que le corresponde por ley con la manutención del menor. Gaby ha luchado y sigue luchando por que su pequeño tenga una figura paterna presente.
Ése, y no otro, ha sido su objetivo desde el minuto cero. Que Bertín estuviera y ejerciera como padre. En esa línea, las distintas fuentes con las que contacta este medio en los últimos días inciden en que Guillén es una mujer con una gran autonomía a nivel económico y no necesita de ningún hombre para sobrevivir.
"Con su trabajo, al chico no le va a faltar de nada", matiza una buena amiga de la paraguaya. Conviene puntualizar que Gabriela abrió, hace un tiempo, en Madrid su propio centro de estética, MGG Beauty. Un negocio que en el último tiempo no ha parado de crecer y en el que la modelo ha invertido mucho dinero, tiempo y esfuerzo.
Se insiste en que el negocio va "superbién y Gaby tiene la agenda petadísima". Se trata de un salón de belleza muy próspero, de acuerdo a los datos que controla este medio. Entre sus especialidades, se encuentran certificados en microblading, tratamientos que abarcan desde la extensión de pestañas hasta la maderoterapia o el lifting. También tienen en su catálogo el tratamiento con dermapen o la depilación láser.
Mención aparte se merece la maderoterapia. Gaby empezó con este establecimiento de forma muy humilde y ha ido creciendo poco a poco. Ahora, EL ESPAÑOL puede confirmar, a través de una clienta que confía en los servicios de Gabriela, que desde hace unas semanas la paraguaya ha instalado su centro de operaciones, su clínica, en su propia casa.
Detallan a este medio que el salón de belleza podría estar cerrado en la actualidad -EL ESPAÑOL ha llamado al centro y se especifica que el número de teléfono ya no existe-, y Gaby recibe a sus clientes en su propio domicilio. Ya ha instalado todos los aparatos y ya trabaja con absoluta normalidad. Cuentan que esta decisión obedece a querer pasar más tiempo con su hijo.
Gaby se ha querido "facilitar la vida" teniendo el trabajo cerca de su hijo y así poder compaginarlo todo. No quiere perderse ningún momento de su hijo y tampoco quiere "delegar en la crianza". Conviene puntualizar que Gabriela vive de alquiler en un piso que se encuentra muy próximo al Parque de El Retiro en Madrid y a escasos minutos de Fuente del Berro.
Hace unos días, a EL ESPAÑOL se trasladó que tras el acuerdo entre Gaby y Bertín, la empresaria desea "olvidar el pasado", hacer borrón y cuenta nueva y ver qué le depara esta nueva etapa con Bertín. El entorno de ambos apuntó a este medio que Gabriela y Bertín siguen sintiendo el uno por el otro. "Quién sabe si después de todo vuelven", aventuró una persona que los conoce y asevera que ambos estuvieron "muy involucrados".
También se traslada a EL ESPAÑOL que las partes han llegado a un pacto de silencio y, pasado el interés mediático, hablarán y se verán personalmente. En esa línea, Bertín ha mostrado "ganas" de conocer al bebé.
Pruebas de ADN y apellido
Este lunes, 17 de junio, se ha confirmado que la demanda de paternidad de Gabriela Guillén a Bertín Osborne sigue adelante, a pesar de que el cantante haya reconocido públicamente que es el padre de su hijo.
La Justicia continúa su curso y Gabriela y su bebé han tenido que acudir este lunes al Instituto Nacional de Toxicología para hacerse los análisis que reconfirmarán lo que el presentador descubrió de modo privado. Diferentes fuentes aseguran que tras la mediación de José Luis López El Turronero (60), ambos se hicieron las pruebas en un laboratorio privado elegido de común acuerdo, el pasado 20 de mayo.
Una vez el resultado arrojó que el cantante era el padre del pequeño, fue cuando el exmarido de Fabiola Martínez (51) decidió lanzar un comunicado asumiendo públicamente la paternidad del niño. Intentando esquivar a la prensa, la paraguaya ha accedido al citado instituto en coche sin hacer declaraciones sobre este inesperado giro de guión.
Tras varias horas en el interior, Gaby y su hijo han abandonado el Instituto de Toxicología. A la espera de llegar a un acuerdo sobre la manutención y el régimen de visitas, fuentes cercanas a Gabriela han deslizado, además, que la modelo estaría dispuesta a cambiarle los apellidos al menor, que hasta ahora llevaba tan sólo los suyos, para ponerle Ortiz Guillén.
También se ha especulado con la posibilidad de que Gaby se mude a Sevilla, donde reside el artista, para que su bebé esté más cerca de su padre. Y no se descarta que próximamente Gabriela se siente en un plató de televisión para responder a todas y cada una de las dudas que han surgido desde que Bertín reconoció públicamente su paternidad.