Los convulsos 70 años de Bertín Osborne: celebración en Sevilla, reunión con sus hijos, Kike y Carlos, y cambio de imagen
- Según confirma EL ESPAÑOL, el cantante festejará el cambio de década en familia, en la intimidad, con sus hijos y arropado por buenos amigos.
- Más información: Fabiola Martínez, sobre su hijo Kike Osborne: "Cuando cumpla los 18 acaba el colegio. Mi sueño sería crear un centro para él".
Este sábado, 7 de diciembre, un día un tanto nublado y encapotado en Sevilla -ciudad en la que reside-, cumple años el cantante y presentador Bertín Osborne. Y no se trata de un aniversario cualquiera: Norberto Juan Ortiz Osborne cambia de década y alcanza los 70 años en un punto de su vida convulso.
No está transitando, precisamente, el artista por un período de calma y sosiego. Antes se diría que al contrario: los últimos años no han sido fáciles para Bertín en lo concerniente a su vida privada. Muy en concreto, la imagen de Osborne se vio especialmente zarandeada y mermada cuando se descubrió el embarazo de Gabriela Guillén (32).
Bertín iba a ser padre a los 69 años. Una paternidad -tardía e inesperada- junto a la paraguaya que el comunicador gestionó envuelto en polémica. Ahí arrancó una etapa turbulenta para el exmarido de Fabiola Martínez (51). A ese escenario, ya de por sí delicado, se ha sumado una débil salud y una proyección como cantante algo tocada.
No, decididamente no es un trance boyante para Osborne, pero él es alguien resiliente, que sabe sobreponerse ante la adversidad. Quien lo conoce bien dice de él que este día tan importante en su calendario vital lo vivirá en la intimidad, en familia, en su casa de campo de Sevilla.
"Creo que no hará gran cosa", se desliza. En realidad, nunca ha sido él muy partidario de los grandes festejos. Además, se apunta lo que sigue: "En los últimos años Bertín no ha sido muy de celebrar los años". Esto no es óbice para que no se reúna con unos cuantos amigos en su finca, como acostumbra.
También festejará Osborne su 70º cumpleaños, al menos ésa es su intención, según se desliza a EL ESPAÑOL, con sus hijos. Además de comer con sus hijas mayores, Alejandra (46), Claudia (35) y Eugenia Osborne (38), se espera que pueda pasar tiempo que sus vástagos menores, Kike (17) y Carlos (16).
Guarda grandes esperanzas Bertín en el año 2025. De entrada, así se cuenta a este diario, está en disposición de "darle un giro" a su imagen pública. Es consciente el cantante de rancheras que su nombre y su figura, siempre tan querida y admirada, se ha visto resentida de un tiempo a esta parte, y desea ponerle solución y remedio.
Para ello, se está dejando asesorar y procura hacer caso a quienes entienden y lo aconsejan bien. Una de estas personas, según le consta a este diario, es Remedios Cervantes (60). Se conocen desde hace años, cuando ambos presentaban programas de televisión, son íntimos amigos.
No solamente conserva amistad Remedios con Bertín, también con la exmujer de éste, Fabiola. Además, la agencia de comunicación que capitanea Cervantes, R Medios Marketing, ha organizado la segunda edición de los Premios Dona2, celebrada el pasado 28 de noviembre.
Volviendo a la figura de Osborne, se detalla que en 2025 está planeando hacer una gira musical de despedida. La decisión de su adiós a los escenarios llevaba tiempo barruntándola, pero su último bache de salud, un Covid persistente, terminó por empeorar notablemente su voz.
"Está cuidándosela", se hace constar, al tiempo que se descubre la ilusión con la que enfoca este proyecto. Más allá de la música, Bertín ha sabido explorar otros terrenos y fuente de ingresos. Por ejemplo, a nivel empresarial se ha aliado con un buen amigo, José Luis López Fernández (61), y han lanzado una línea de productos gourmet, Bertín Osborne Selección.
En otro renglón, en lo referente a su relación con Gabriela Guillén, EL ESPAÑOL puede confirmar que es más cordial de lo que se traslada a nivel público. De ahí las conciliadoras palabras que empleó Gaby -como se la conoce en la intimidad- en su último acto público, cuando aseguró: "Está todo bien. Si esta Navidad quiere ver al niño, no tendré problema".
Eso sí, la de Paraguay seguirá adelante con la línea judicial que emprendió para que Bertín reconozca su paternidad. "Comencé este proceso porque confío en la Justicia y además no tenía otra manera de demostrar la verdad y limpiar mi nombre por todas las cosas que dijeron de mí los que me cuestionaron. Todo seguirá en manos de la Justicia", explicó ella en Informalia.
Primera Navidad sin su padre
Bertín vivió el pasado 18 de octubre uno de los días más funestos y difíciles de su vida: ése en el que tuvo que decir adiós a su padre y referente, Enrique Ortiz López-Valdemoro. El progenitor de Bertín pereció a los 96 años. Se le despidió e incineró en la Tanatorio de Tres Cantos, únicamente acompañado por sus hijos.
Fue todo muy reducido e íntimo. Así lo pidió el propio Enrique, tan alérgico como era a los focos y la atención mediática. Quien lo conoció en vida, y trató, sostiene a este medio que Ortiz López-Valdemoro no quería una despedida multitudinaria.
"No le gustaba la prensa rosa ni ser centro de las informaciones", contó alguien próximo a EL ESPAÑOL. Y se añadió: "Fue un dandi hasta el final de sus días". Sobre su estado de salud, este medio conoció que "los últimos 15 días fueron complicados". Estaba "pachucho", aunque él siempre trató de restarle importancia.
Enrique Ortiz, conde de Donadío de Casasola, provenía de una familia de gran prestigio y abolengo. Tras su partida, Bertín se convertirá en el VIII conde de Donadío de Casasola y VII conde de las Navas, los títulos aristocráticos que hasta su muerte ha ostentado Enrique Ortiz y que ahora heredará su hijo.