El mes de mayo iba a ser especial para muchos personajes públicos. Dos ejemplos de ello son Feliciano López (38 años) y Toni Acosta (48). El tenista debería ejercer las labores propias del director del Mutua Madrid Open, mientras que la actriz tenía marcado en rojo en su agenda algún estreno cinematográfico, como la secuela de Padre no hay más que uno. De esos planes desbaratados y de cómo están llevando esta crisis del coronavirus hablaron ambos este miércoles en El Hormiguero.
Parece que en esta crisis el pesimismo por el futuro económico va ganando terreno a las noticias sanitarias. Así se dejó ver en la recomendación diaria de Pablo Motos (54): "Hoy quiero hablar de dos lecciones de la vida que sé que son verdad y que las aprendí el mismo día. Un día en Onda Cero Valencia me encontré a un hombre gritando con la secretaria. Quería un descuento en la publicidad porque, según él, era un cliente muy importante. Tras hablar con el director, le dije que le bajaríamos un 5%. Me preguntó quién era yo y que a partir de ahora quería que yo le llevara su publicidad. Al mes siguiente vi que mi nómina se había multiplicado por 20 por la comisión. Llegaba a final de mes, muy justo, a veces mis padres me tenían que ayudar. Fui al banco y salí a la calle a gastármelo. Le di un buen pellizco a un mendigo. Luego me lo encontré en una marisquería en la que yo quería darme un homenaje. Le dije que se cortara un poco y administrara el dinero. Me dijo 'si cuando no tengo dinero no puedo comer gambas, y cuando tengo dinero tampoco, ¿cuándo voy a comer gambas?'. Me di cuenta de que al final los dos estábamos en una situación similar, disfrutando de un golpe de suerte", detalló.
Toda esa historia tenía una moraleja para el momento actual: "Que las cosas estén mal no significa que no vayas a salir de esta. Lo importante es que tengas una actitud enfocada al presente, porque puede llegar un golpe de suerte y tienes que estar atento para aprovecharlo".
Después del consejo, el ambiente del programa cambió radicalmente. Uno de los temas de conversación fue el momento más bochornoso habían vivido los tertulianos en sus vidas. La palma se la llevó Pablo Motos, quien contó que con 10 años tocó la guitarra en una abarratoda plaza de toros de Requena. La actuación fue bien, pero un episodio escatológico hizo que todo el mundo acabara diciendo "el chiquillo se ha cagado".
Muy zen
Tras estas anécdotas, la primera en ser entrevistada fue Toni Acosta. La actriz canaria reconoció que llevó peor el confinamiento al principio pero que ahora está bien. Lo está pasando con sus hijos y su perra, a la que pasea mientras los chicos se conectan para su actividad académica. "En medio escribo, hago sketches, grabo vídeos…hasta me ha cortado el pelo mi hija", explicó. Acosta además confesó que se había vestido para la ocasión: "Estoy harta de chándal. Además, hay que irse probando los vaqueros por si acaso", bromeó.
Una de las situaciones curiosas que ha vivido es que le mandaron un técnico para conectarle un aparato de la Cadena Ser para poder emitir. Le hizo un vídeo de cámara oculta como desinfectándole y recuerda con gracia que "el chico se prestó a todo. Llegamos a emitirlo y todo".
Sobre el estreno de la secuela de Padre no hay más que uno, "ya hay fecha, el 7 de agosto, habrá que cruzar los dedos, poner velas…lo que sea necesario. A lo mejor vamos a estar nosotros en el cine, pero bueno". Sobre su relación con Santiago Segura (54) "me siento muy feliz con él, somos muy diferentes de carácter, él es muy realista, mientras que yo soy muy positiva y creo que todo va a salir bien".
Por otro lado, Toni Acosta confesó que hace yoga y meditación y que si la gente ha hecho bien el periodo de confinamiento "deberíamos salir de esta modificados para bien. Íbamos a todos los sitios corriendo, sin llegar a tiempo a nada y pasando poco tiempo con la familia. Por eso lo pasé peor al principio, acostumbrarse a parar no es fácil. Es un camino que he iniciado".
Parada obligatoria
El siguiente en pasar por la palestra fue Feliciano López, quien "nos pilló por sorpresa. Estaba preparando el torneo de Indian Wells. Veíamos con preocupación las noticias que llegaban de Italia y China, no pensábamos ni mucho menos que estábamos en peligro. El día antes de empezar el torneo se detectó en un caso en el área y el dueño del torneo lo canceló. Hubo gente que le tildó de alarmista. A los pocos días, Miami también confirmó la cancelación del torneo. Volví a España y ahí se decretó el Estado de Alarma".
Este paréntesis está siendo novedoso para el toledano. "Diría que es el periodo más largo que he estado sin jugar al tenis en los últimos 20 años, porque gracias a Dios no he tenido lesiones. Hago lo que puedo, tengo una bici estática, unas mancuernas…algunas cosas para mantenerme en forma".
Eso sí, la cancelación de tantos torneos le ha tocado muy de cerca, ya que en estos días la madrileña Caja Mágica debería ser el epicentro mundial del tenis: "Estamos un poco triste esta semana, la verdad. Son los días en los que se tendría que estar jugando el torneo. Sabe mal la cancelación, sobre todo por el equipo, que lleva trabajando un año entero. Fue un palo, pero creo que todo el mundo lo ha entendido. Estamos deseando hacerlo, hay una posibilidad pequeñita de que se haga a final de año. Y si no, el año que viene celebraremos la vigésima edición".
En relación a una posible vuelta a la actividad, López le trasladó a Pablo Motos que "no soy muy positivo. El tenis tiene un problema, es un deporte muy global, se juega en muchos sitios diferentes, con tenistas de muchos lugares distintos. Tendría que estar todo el mundo abierto para ello. Creo que vamos a ser de los últimos en volver a la actividad. No sería justo, por ejemplo, que un español pudiera competir y un norteamericano no".
Pero como no hay mal que por bien no venga, Feliciano López está pudiendo disfrutar de algo que en otras temporadas sería impensable: "Una de las cosas positivas del confinamiento ha sido poder disfrutar de mi casa durante dos semanas seguidas. La convivencia ha sido una pequeña prueba de fuego, estamos recién casados, estamos conviviendo juntos y la prueba ha sido superada".
Sobre su día a día, el tenista detalló que "me levanto temprano, sobre las 7 de la mañana. Me tomó un café escuchando a Alsina, después paseo al perro. Sobre las 10 me pongo a hacer ejercicio, pero estos últimos días he estado liado con el torneo virtual que hemos hecho. Por las tardes he hecho algún Instagram Live con un compañero, la verdad es que se me ha pasado muy rápido este tiempo".
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