La marea de los Presupuestos Generales del Estado ha mandado a la industria cultural a la nostalgia de la que lleva años deseando salir. El Ministerio de Hacienda de Cristóbal Montoro ha limitado la partida de ayudas al Ministerio de Cultura de Íñigo Méndez de Vigo, que se había dedicado durante meses a prometer por encima de sus posibilidades.
Ahora, con el programa económico sobre la mesa, se confirma que el sector vuelve a ser castigado y que el cine no será cuidado con la rebaja del 21% del IVA cultural, que el ministro insiste en señalar que no existe. De hecho, tras presentar los presupuestos del recorte, Méndez de Vigo declaró en el Congreso de los diputados que "no hay quien se crea que por 60 céntimos de diferencia hayan cerrado 300 salas".