Con un escueto comunicado, el Ayuntamiento de Baiona (PP) ha anunciado la cancelación de la charla de Fernando Sánchez Dragó, organizada dentro del ciclo de conferencias de la Fiesta de la Arribada, tras la polémica desatada durante los últimos días. A pesar de que el alcalde Ángel Rodal había asegurado que la charla del escritor se mantendría, este jueves el gobierno del consistorio se ha visto obligado a adoptar esta medida tras las críticas y las presiones de los partidos de la oposición y varias asociaciones feministas.
"Estamos en un país sectario, fanático y aristofóbico que detesta la libertad de expresión", ha señalado Dragó a EL ESPAÑOL, confesando que hasta ahora nadie le había comunicado la cancelación de su conferencia, programada para el próximo 16 de mayo y titulada ¡Y allá, a su frente Estambul! "Estoy encerrado escribiendo, vivo ajeno de todo. Me sorprende, pero bueno... Mi filosofía es que nada importa nada, yo nunca discuto".
La censura de la charla se produce un día después de que Dragó recibiese una llamada desde la organización del Ciclo de Conferencias de los Pueblos Colombinos en la que le aseguraban que no se preocupara, porque su presencia en Baiona (Pontevedra) no corría peligro. "Me dijeron que el alcalde no la iba a cancelar de ninguna manera", explica el autor de La prueba del laberinto. Pero esas promesas han caído en saco roto.
A Sánchez-Dragó le han llovido las críticas desde todas partes. Primero fue la responsable de Igualdad de la Diputación de Pontevedra, Isaura Abelairas (PSOE), la que se manifestó en contra de la presencia de "un individuo que alardea públicamente de encuentros sexuales con menores de edad, que insulta a las mujeres y que niega la violencia machista". ¿Y qué responde el escritor a esto? "Que me digan machista es como que me digan facha, no me lo tomo muy en serio. Me he pasado la vida diciendo que quiero ser mujer".
Desde el Bloque Nacionalista Galego y el partido Manifesto Miñor también han expresado durante la última semana su malestar por que Dragó, un "homófobo", apareciese en el cartel del ciclo de conferencias. Pero sin duda, la formación más crítica ha sido Esquerda Unida, llamando al Premio Planeta 1992 "abusador sexual" , "negacionista de la violencia machista" y "liquidador de los servicios públicos". Por el primer insulto, amenaza Dragó con llevarlos a los tribunales.
"Está escrito en mis memorias: jamás he tenido el mínimo contacto con una chica que no tuviese 18 años", asegura. Y respecto a las acusaciones de homofobia y racismo, contesta Dragó que ha sido "pionero en la defensa de los homosexuales" y cómo va a ser racista si tiene "un hijo medio japonés". Incluso se había abierto una petición en Change.org, bajo el lema "Fuera machistas de las instituciones. Fuera Sánchez Dragó del Miñor. #NoConNuestroDinero", para frenar la participación del novelista en los actos culturales de Baiona.
En definitiva, cree que esta censura a su intervención en la Fiesta de la Arriba, basada en "calumnias", se debe a un "veto ideológico". "Iba a hablar de algo muy cercano al espíritu gallego, de Pontevedra, sin ninguna implicación ideológica, pero en estos momentos en España no hay libertad de expresión. Se me ha faltado al respeto, es evidente", concluye Dragó.