El arquitecto catalán Ricardo Bofill ha defendido este miércoles a su colega de profesión, el valenciano Santiago Calatrava: "A pesar de las críticas, es un buen arquitecto, aunque se le caigan cosas".
Así lo ha manifestado durante la presentación de 'Ikon', un edificio residencial de la promotora Kronos Homes que está llamado a ser el edificio más alto de toda Valencia con sus 100 metros de altura y dos torres de 30 y 14 plantas.
Bofill ha reivindicado el papel de Calatrava como uno de los arquitectos del 'star system' mundial, que a su vez es también ingeniero. "Hace cosas insólitas y diferentes pero la gestión no está muy bien hecha" y "a pesar de que es un arquitecto buenísimo hay una mala gestión", ha lamentado.
En este sentido ha señalado que "hay que aprender en Valencia sobre la gestión y el mantenimiento" de los proyectos, sobre todo los públicos, ha remarcado. Según Bofill, "antes ocurría que se calculaba el precio del terreno y la construcción como si fuera un negocio", pero después "hay que mantenerlo", ha advertido. Ahora, el "equilibrio financiero debe contar con que también "se gestiona y se mantiene".
El arquitecto catalán ha aprovechado para recordar que él mismo ha participado de la evolución de Valencia estando "en el origen del paso del franquismo al nuevo urbanismo" de la ciudad.
A su juicio, la capital del Turia es muy bonita, "mezcla una historia y una las raíces muy claras y significativas con una energía especial". Vivió una "etapa anterior de planeamiento y ahora vuelve a mirar a la vegetación y el cambio climático, las bicicletas... están sobre la mesa". "Valencia sigue esta lógica general de una ciudad sensible a momentos diferentes", ha concluido.