El actor Antonio Resines ha montado un buen pollo -público, y con intención de que lo sea para denunciar la situación- frente a la oficina de la Seguridad Social de la calle Gómez Ulla de Madrid, que, como recogían las cámaras de la televisión, estaba llena de gente a la que nadie atendía. "Supuestamente se puede solicitar cita previa, pero no atienden", lanza un furibundo Resines. "Hay que decir públicamente no nos están atendiendo, ni en los teléfonos que ponen aquí ni en la página web de la Seguridad Social. Nada funciona".
"Hay una serie de gente aquí que está esperando", prosigue el actor. Y señala algunos casos que le han comentado los ignorados ciudadanos. "Jubilación, pensiones... todo tipo de ayudas, etc. ¿Por qué no hacemos algo de una vez? ¿Por qué no da la cara el ministro Escrivá? ¿Por qué no se atiende a la gente? Voy a darle una posibilidad: porque aquí no hay gente y no quieren contratar a más gente", arremete.
"Sólo hay aquí una guarda de la Seguridad Social. He solicitado hablar con el director de la sucursal y me niegan el paso. Este edificio es público. Es de la Administración del Estado. Lo estamos pagando entre todos nosotros y me gustaría que alguien que tenga mando en plaza me contestase, a mí y a toda esta gente que está aquí esperando a que le den una cita porque necesitan el dinero, ¿o no lo ha entendido la gente? Pues eso".
Resines ha hecho hincapié en que quiere que ese llamamiento se haga viral porque la situación es insostenible. El actor acudió hace unos pocos meses a la Sexta Noche y expresó que esto es "una desgracia", pero una desgracia que "ha ocurrido, y ya está". Subrayó también que los gobernantes no podían olvidarse de la Cultura, porque, aunque la habían tildado de "bien de primera necesidad", no había ninguna medida real en el juego de propuestas. "Esto no es culpa de nadie (...) El Estado tiene que poner el dinero sobre la mesa. La Cultura tiene que ser una cuestión de Estado", lanzó.