La palabra "Navidad" viene del latín "Nativitas", es decir, "nacimiento". En estas fechas celebramos el nacimiento de Jesucristo, presuntamente el día 25 de diciembre, pero lo curioso es que en la Biblia en ningún momento se menciona fecha ni se llega a especificar mes, día ni hora de la llegada del mesías al mundo. Es más: la mayoría de historiadores sostienen que Jesús nació en primavera -otro dato curioso: tampoco los ángeles cantan en ninguna parte de la Biblia y ahora es una de las imágenes más recurrentes-. Entonces, ¿por qué celebramos su nacimiento ahora?
Probablemente se escogió el 25 de diciembre porque coincide con el antiguo festival pagano Saturnalia, que consistía en honrar al dios agrícola Saturno con juegos de azar, regalos y verbenas. Las Saturnales eran una gran festividad romana y uno de sus ritos más icónicos implicaba un sacrificio en el templo de Saturno, amén de un banquete público de excepción.
La Navidad, tal y como la conocemos, comenzó a celebrarse en el año 345, cuando por influencia de San Juan Crisóstomo y San Gregorio Nacianzeno se proclama esta fecha para la Natividad de Cristo.