Poco después de fallecer en Chamonix, Francia, a los 65 años, Philippe Gaussot (1911-1977) se convirtió en un personaje nuevo para su familia. Era uno de los fundadores del diario regional Le Dauphiné Libéré, un periodista conocido y especializado en la fotografía de montaña, pero nunca les había relatado a los suyos el papel que desempeñó durante el desenlace de la Guerra Civil española, ayudando a los exiliados republicanos en su huida. Ordenando las cajas y pertrechos que había dejado para una mudanza, su hijo Jean-Philippe halló una maleta llena de negativos, un tesoro visual: uno de los escasos documentos gráficos que existen de "la Retirada".
"Mi padre era un fotógrafo humanista, muy modesto, que nunca había contado todo lo que le había pasado ni a mi madre. Justo antes de morir quiso dejar por escrito su historia, su labor en el Comité Nacional Católico, la ayuda que prestaron a los niños españoles refugiados...", explica Jean-Philippe a este periódico, recordando el caso de la película Tierra y Libertad, de Ken Loach, en la que una joven británica descubre que su abuelo formó parte de las milicias republicanas a través de cartas y documentos que este había guardado en una caja.
Jean-Philippe rescató del olvido las instantáneas tomadas por su padre, que reflejan la angustia y las duras condiciones del exilio: la retirada hacia un país extranjero con lo puesto, de una caravana humana que se amontona en las carreteras, que queda hacinada en unos campos de concentración desbordados, en pésimas condiciones; de las familias rotas. Y las ha sacado a la luz gracias al realizador catalán Felip Solé y a la asociación 24 Août 1944, destinada a promover la historia de los refugiados españoles que siguieron combatiendo al fascismo.
Después de una mínima muestra en París, en la sede de esta asociación, un centenar de imágenes inéditas de Philippe Gaussot, nunca antes expuestas —su caso recuerda a otro reciente, el del fotógrafo catalán Antoni Campañà—, acaban de llegar a La Arquería de Nuevos Ministerios, en Madrid, para formar parte de la monumental exposición homenaje dedicada al exilio republicano en su ochenta aniversario y que está impulsada por el Ministerio de Justicia. Una diáspora que ofrece ahora escenas desconocidas gracias a este legado visual de enorme valor.