Unas excavaciones realizadas en el yacimiento iberorromano de Cástulo, situado a cinco kilómetros de Linares (Jaén), han sacado a la luz un busto del siglo I. La escultura, presentada hoy lunes en el yacimiento por la consejera de Cultura, Patricia del Pozo, fue encontrada en el área 1 delante del gran edificio visitable desde el año pasado.
La pieza, aunque perteneciente al siglo I, al parecer podría haber sido enterrada en el siglo IV, en un agujero realizado en la calle, donde ha sido encontrado rodeado de piedras, lo que podría significar que fue ocultado con un cierto ceremonial.
Las primeras teorías apuntan a que se trata del busto de una mujer, quizás de la diosa Minerva, sin embargo no se puede determinar, ya que está algo destrozado en la parte de la boca y la nariz. Es una pieza de mármol blanco, donde se puede ver un gorro con decoración en cuadrados y en un lateral hay lo que parece una especie de animal con dos patas levantadas.
Unos técnicos limpian la cabeza de un busto del siglo I que ha salido a la luz en unas excavaciones realizadas en el yacimiento iberorromano de Cástulo, situado a cinco kilómetros de Linares (Jaén).
La imagen podría formar parte del propio edificio enterrado en época cristiana para ser preservado, aunque tendrá que ser limpiado y estudiado. La consejera ha explicado a los medios que el hallazgo se ha producido cuando se realizaban excavaciones delante del edificio por unas obras en el terreno que se había abierto por la vía natural del agua.
El gran edificio delante del cual ha sido encontrado el busto, tiene 1.200 metros cuadrados y fue construido con sillares de grandes dimensiones, del que se conocía su cabecera gracias a las intervenciones arqueológicas realizadas en los años 80 por José María Blázquez.
Las intervenciones realizadas en el mismo permitieron conocer la fachada principal de este, con unos 30 metros de longitud, que cuenta con una puerta central con acceso mediante una pequeña escalinata y seis vanos que dan acceso a diferentes 'tabernae' (locales comerciales abiertos a la calle en ciudades de la antigua Roma). En la zona 1 se encuentra el centro neurálgico del yacimiento, la zona comercial de esta ciudad que siglos después fue usada como sinagoga por los judíos.