La Guerra Civil española fue un conflicto territorialmente desigual. Los frentes estaban localizados de manera no contigua y los generales y altos mandos de ambos bandos debían recorrer largos trayectos para llegar a cada batalla que tenía lugar en el conflicto más cruel y sangriento del siglo XX en España.
En este sentido, Francisco Franco, quien durante la guerra se convirtió en el líder del bando nacional, tenía en sus manos un camión especial con el que se desplazaba al frente. El vehículo formaba parte de un convoy en el que cada uno de los camiones tenía una función, además del movilístico.
De los Ford 817 T actualmente solo están restaurados el utilizado por el futuro dictador como dormitorio, que descansa en el Pardo bajo la custodia de la Guardia Real, y el que ha adquirido recientemente el empresario Jorge Sandoval, utilizado durante la Guerra Civil como comedor para Franco y sus hombres.
Franco en el frente de Cataluña en el invierno de 1938.
Residente de Colloto (Asturias), Sandoval se ha hecho con el vehículo fabricado en 1937 tras comprarlo por un precio irrisorio si se tiene en cuenta el testimonio de los expertos. El empresario ha conseguido comprar el camión de Franco por 3.200 euros, toda una ganga. Pese a tener un precio estimado de 30.000 euros, la quiebra de la empresa madrileña Desguaces La Torre se ha visto obligada a deshacerse de su museo de coches históricos, por lo que el precio de esta joya histórica se ha reducido drásticamente.
El transporte todavía no está adecuado para circular, pero su nuevo propietario ya se ha puesto en contacto para arreglar y modificar las piezas anticuadas. Su intención, tal y como explica el diario asturiano La Nueva España, es emplear el camión en películas históricas y exposiciones. Y es que este vehículo no es el único en manos de Sandoval. El empresario asturiano también colecciona armamento, vehículos blindados y avionetas que se utilizaron en la Guerra Civil.
Regalo de Henry Ford
El camión comedor de Franco pertenece a una serie de siete vehículos que podrían haber sido regalados directamente por Henry Ford. En la década de 1920, Ford se había convertido en uno de los mayores productores de coches de todo el mundo con su Ford T (la mitad de los automóviles que se vendían en Estados Unidos salían de sus factorías).
Tras el auge del fascismo y del nazismo, Ford abrazó el antisemitismo. En lo que concierne a España, además, la única fábrica Ford se encontraba en aquellos momentos en territorio republicano, por lo que Franco no podría haber conseguido dicho vehículo. Por lo tanto, la teoría de que fue una donación del propio Henry Ford aumenta el valor simbólico del camión que Franco utilizó en el frente.