Una excepcional necrópolis islámica con al menos 400 tumbas datadas entre los siglos VIII y XI ha aparecido en la localidad zaragozana de Tauste, de apenas 7.000 habitantes. El impresionante hallazgo se ha registrado en la avenida Obispo Conget, bajo el suelo asfaltado y en una zona rodeada de numerosas viviendas, y confirma que se trata de uno de los enterramientos colectivos más antiguos de España.
Ha sido gracias a un proceso de urbanización por lo que estos cuerpos han emergido a la superficie. Por el momento, los arqueólogos han encontrado 400 tumbas -la mayoría de ellas en gran estado de conservación- y esperan que el cómputo total ascienda a unas 500 al finalizar los trabajos.
"Aunque se aprecian afecciones producidas por tuberías de saneamiento, la zahorra y el pavimento habrían preservado las tumbas prácticamente intactas", ha explicado el equipo de arqueólogos de la empresa Paleoymás, encargada de la excavación y posterior estudio de los restos. Ellos han sido los encargados de continuar con el primer proceso de excavación que llevó a cabo la asociación El Patiaz, formada principalmente por los vecinos de Tauste interesados en la divulgación de temas que conciernen al pueblo.
Siempre que se removía el terreno para cualquier obra o proyecto de urbanización se encontraban pequeños restos humanos. En un primer momento, la asociación especuló que podrían pertenecer a fosas comunes de gente que había fallecido en el siglo XIX por un brote de cólera.
No obstante, indagando en la tierra, se percataron de que los cuerpos no tenían ajuares y estaban orientados de forma específica. En este sentido, los fallecidos miraban al sureste, concretamente a La Meca.
Poco a poco, a partir de 2010, se fueron documentando más tumbas hasta llegar a 44 cuerpos de la época musulmana. Ahora, tras años de una gran labor de la asociación vecinal, el proyecto se ha profesionalizado gracias a los arqueólogos de Paleoymás. De esos cadáveres identificados en la primera fase de excavación se ha extendido el número a medio centenar. Según Francisco Javier Gutiérrez, director de cuatro de las excavaciones, podría haber unos 4.000 o 5.000 enterramientos.
"Para encontrar vestigios de la estructura de la localidad en tiempo islámicos habría que levantar medio pueblo", explica la antropóloga Miriam Pina Pardos a EL ESPAÑOL. Pina, que dirige el Observatorio Antropológico de la Necrópolis Islámica de Tauste (OANIT), se encarga del análisis de los restos procedentes del área y afirma que se trata de un "yacimiento excepcional".
La Reconquista
Entre los restos se han encontrado pequeños elementos como pendientes y, gracias a la exhaustiva investigación, los expertos han podido descifrar más detalles sobre la población musulmana que habitó en Tauste.
"Aquí lo más importante es que se reescribe la historia. Se había pensado que cuando Alfonso I conquistó Tauste, la presencia islámica era escasa", puntualiza la antropóloga. Asimismo, gracias a un análisis de ADN se ha comprobado que los cuerpos tienen ascendencia africana y tras varias pruebas han llegado a conocer que su dieta se basaba principalmente en cereales y, en menor medida, en carne y pescado. "Los hombres adultos comían mejor que los jóvenes", aclara Pina.
Este hallazgo convierte al yacimiento de Tauste en una de las necrópolis más antiguas de España junto con la de Pamplona. El proyecto es ambicioso y, a la espera de los últimos resultados de los restos, cabe la posibilidad de museizar este yacimiento a base de réplicas que muestren la realidad de este gran enterramiento.
Actualmente, la excavación sigue su curso y la extracción de cuerpos continúa. Se está desarrollando un proceso de retirada, limpieza y almacenamiento de los restos. "Queremos seguir aportando datos sobre una necrópolis absolutamente desconocida. Va a ser una de las más importantes del norte de España", agrega la antropóloga.