Los sueños han tomado tierra: la Plaza de España ya tiene diseño. En ese baile imposible de 70 propuestas como 70 paraísos entre Narnia y Oz -unas fantaseaban con pasarelas flotantes, otras con una evocación de Egipto, una última, con zonas verdes plagadas de Pokémons-, la ganadora acaba de salir a la luz. 212.108 personas -de las 2,7 millones convocadas, es decir, el 7,85%- han participado en la primera consulta ciudadana de Madrid para decidir el futuro de la plaza. Dice Rita Maestre, portavoz del Gobierno municipal, que "ha sido un éxito de participación rotundo y sin paliativos". El coste de la consulta del primer gran proceso participativo de Carmena ha superado el millón de euros.
El proyecto que ha salido triunfante ha sido el "X", el de mayor presupuesto: plantea conectar la plaza con la Gran Vía a través de una explanada, hacer crecer la zona de arbolado incluyendo olivos y magnolias y hasta cambiar la dirección de la estatua del Quijote, que mirará hacia la Gran Vía y el Edificio España. Esto incumpliría con una de las cláusulas. El presupuesto de la remodelación es de 46 millones de euros. "Lo gira 180 grados. Lo orienta hacia el Edificio España. Las bases hablan de desplazar, no de girar, y el Jurado técnico ha determinado por unanimidad que esto no incumple las bases", aseguraron en su momento a este periódico desde el Área de Participación Ciudadana, Transparencia y Gobierno Abierto.
El proyecto pretende hacer crecer la zona de arbolado incluyendo olivos y magnolias y hasta cambiar la dirección de la estatua del Quijote, que mirará hacia la Gran Vía y el Edificio España
El monumento girado estará rodeado por una lámina de agua con surtidores. El túnel de la calle de Bailén se prolongará hasta Ferraz y se incrementará la zona peatonal en superficie.
Welcome mother Nature, goodbye Mr Ford: ése es el lema. Su intención es revitalizar una plaza "estancada en el tiempo" e "inhóspita" de "tanto tráfico". Juegos infantiles, pavimento reciclado, zonas de ejercicio, 60.000 coches menos al día y 1.000 árboles más. El ganador con el 52,19% de los votos también reducirá los carriles en la Gran Vía, dando un efecto de uniformidad entre la entrada a la plaza y la parte final de la arteria. "La ciudad va a ser más accesible, verde y sostenible: se reducirá el tráfico del vehículo y se ampliará el peatonal", ha señalado el concejal de Urbanismo, mientras detallaba que las obras empezarán a final de año.
Lo cierto es que este proyecto es el más radicalmente verde, porque el otro finalista, bautizado como Un paseo por la cornisa, también estipulaba incremento del arbolado, pero más tímidamente, además de una más amplia zona de espacio libre en la plaza que permitiese a los ciudadanos desarrollar las diferentes actividades.
Una semana de recuento
El escrutinio de los más de 950.000 votos emitidos -cada persona votaba tres papeletas, más en algunos distritos, por tres vías diferentes: correo postal, urnas presenciales e Internet- ha sido realizado por voluntarios, que han tardado una semana en contar los votos. Soto ha explicado que el número de papeletas es similar al de unas elecciones, pero no así la "fuerza de trabajo" para contarlas. En unas elecciones de 10.000 personas "obligadas" y en Madrid, a mitad del escrutinio habían participado 1.300 voluntarios.
El equipo de Gobierno ha destacado que la mayoría de los votantes han sido mujeres, el 50,79 por ciento. También que el grupo de edad que más ha participado ha sido el de mayores de 65 años
El equipo de Gobierno ha destacado que la mayoría de los votantes han sido mujeres, el 50,79 por ciento. También que el grupo de edad que más ha participado ha sido el de mayores de 65 años (25.930 personas), por lo que se han "roto dos grandes brechas participativas" gracias al "sobre amarillo" del voto postal.
Los datos de la consulta convocada por el Ayuntamiento de Madrid
"Por primera vez las grandes decisiones en materia de urbanismo las decide la gente", ha asegurado el delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, que cree que la ciudad "gana" en ser "más verde", mejorar la "calidad medioambiental", ser "accesible" y "sostenible".