Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil han sorprendido a dos personas en el campo cuando hacían uso de detectores de metales en Loranca de Tajuña (Guadalajara). Los agentes incautaron una bolsa con monedas antiguas, broches, proyectiles y otros pequeños objetos de interés histórico. También han sido propuestos para sanción por limitación de entrada y salida en la comunidad de Castilla-La Mancha.
Esta patrulla ha constatado varias infracciones a la Ley 4/2013 de Patrimonio Cultural de Castilla-La Mancha por carecer de las oportunas autorizaciones para hacer uso de aparatos de detección de metales en el territorio de la Comunidad.
Los hechos se habrían desarrollado en el término municipal de Loranca de Tajuña y a una de las personas denunciadas se le habría intervenido una bolsa que contenía varios objetos de interés histórico cultural como monedas antiguas y broches que han sido remitidos al Museo de Guadalajara para su estudio y catalogación.
Tal y como informa la Guardia Civil en nota de prensa, en nuestro país existen personas y asociaciones cuyo ocio consiste en buscar objetos utilizando para ello detectores de metales. Aunque la compra de estos aparatos es libre en la actualidad, su utilización esta condicionada a las diferentes prohibiciones o limitaciones existentes en cada Comunidad Autónoma.
Asimismo, recuerdan que si casualmente se halla algún objeto de interés arqueológico debe entregarse inmediatamente a la Delegación Provincial de Cultura o, en su defecto en el Ayuntamiento o a la Guardia Civil. Un ejemplo de esta conducta ejemplar se registró la semana pasada, cuando Gonzalo Castro, un agricultor cordobés, descubrió mientras araba su olivar una espectacular leona íbera esculpida en piedra.
La provincia de Guadalajara cuenta con una gran cantidad de bienes histórico-culturales entre los que se encuentran numerosos yacimientos arqueológicos. "Sin embargo, existen en nuestro país, personas y redes que se dedican al expolio sistemático de estas riquezas culturales para comerciar ilegalmente con estos objetos en tiendas y mercados", señalan desde la Guardia Civil.
Por ello, recuerdan que este patrimonio oculto "es de todos y que la expoliación enriquece a unos pocos desaprensivos". "Si observa alguna conducta sospechosa en los alrededores de yacimientos arqueológicos o detecta el comercio ilegal de objetos procedentes de los mismos, comuníquelo a la Guardia Civil en el teléfono 062".