En España, la nueva Ley del Bienestar Animal fue aprobada por el Congreso de los Diputados el pasado mes de febrero. Esta nueva normativa trae novedades para la tenencia de mascotas, ya sean perros, gatos u otros animales. 

En el caso de los perros, la ley indica, entre otras novedades, que los canes deberán pasar un test de sociabilidad con que el comprobar que son animales sociales, no agresivos ni reactivos. 

Test de sociabilidad 

La Real Sociedad Canina de España (RSCE) para Perros de Utilidad y Deporte en su página web da algunas claves y explica cómo son las pruebas que realizan ellos desde la institución.

[Las razas de perros potencialmente peligrosos en España]

En cualquier caso, tal y como explica Carlos Alfonso López (experto en adiestramiento y vocal del organismo) a El País, el test al que serán sometidos estos perros será más sencillo. Esta prueba estará compuesta por dos partes.

Primera parte 

La primera busca evaluar el comportamiento y la obediencia del perro. Dentro de esta primera parte, hay siete ejercicios.

[Las razas de perros que tienen que llevar bozal]

1. Esta primera parte empieza con el perro tumbado con distracción dos minutos. Pasado el tiempo, los guías abandonan la zona de forma ordenada.

2, 3 y 4. En los siguientes tres ejercicios, el objetivo es caminar sin tirones de forma controlada por circuitos determinados que decida el juez, donde habrá líneas rectas, giros y cambios de ritmo.

5. Este ejercicio consiste en pasear con el perro entre personas en movimiento, a las que va saludando el propietario.

6. El guía suelta la correa y se separa unos pasos del perro y este debe permanecer sentado y tranquilo.

7. El perro será llamado mediante dos opciones: estando quieto en posición tumbado, mientras el dueño se aleja, y a la señal del juez, acude a su guía; y en la otra opción, habrá un tercero que sujeta al perro del collar, mientras que el propietario se aleja, llama al perro y el veterinario (tercero) libera al animal y este acude a su guía.

Segunda parte 

Esta segunda parte constará de 8 pruebas y evaluará el comportamiento del animal en el entorno urbano. 

1. Bajar y subir de un coche con correa y bozal. 

2. Paseo urbano con correa. 

3. El dueño tendrá que interactuar con otras personas. 

4. El perro se cruzará con otro perro. 

5. El perro debe estar tumbado y relajado en un espacio abierto.

6. Subir y bajar escaleras cruzándose con otros peatones.

7. La manipulación con un cepillo y objeto similar para ver que este permanece tranquilo en todo el proceso.

8. Inspección y chequeo del perro por parte de un veterinario.

Para conseguir el visto bueno se deben superar al menos 11 de las 16 pruebas que hay en el actual examen. Este visto bueno supone obtener un 'apto'. En caso de recibir un 'no apto', se dispone dos oportunidades más para poder hacerlo, aunque deben pasar al menos dos meses entre cada una de las presentaciones.

También te puede interesar...