Luis Alberto Hernando, el guardia civil que revienta récords en el Mundial de trail running

A Luis Alberto Hernando siempre le apasionó el deporte. Desde que tenía nueve años, este burgalés estuvo dispuesto a todo con tal de conseguir grandes logros en él. Inspirado por los entrenamientos compartidos con su padre y su hermano, este burgalés se especializó primero en el atletismo. Después, ya como guardia civil, el biatlón también entró en su vida con éxito, ya que incluso sería olímpico. Más tarde, lo hicieron el esquí de fondo, el skyrunning y los ultras. Hasta descubrir el trail running: su flechazo más profundo.

Tanto es así que este deportista aficionado de 40 años ha hecho historia este sábado en el Mundial de esta última disciplina. Embutido con la bandera de España, celebró por tercera vez consecutiva un triunfo en la competición. Su mujer y su hijo, orgullosos, le esperaban en la meta para celebrar en condiciones la enésima gesta de un hombre hecho por y para el deporte. Que, a buen seguro, nunca imaginó que lograría colocar su nombre en las enciclopedias. Pero que lo ha hecho. Vaya que sí.

Desde que era un niño y hasta los 20 años, correr fue primordial para Luis Alberto. La mayor parte de sus carreras tuvieron lugar en media distancia: 1.000, 2.000, 3.000 y 5.000 metros. Durante su servicio militar, incluso formó parte del club de atletismo Valencia Terra y Mar. Fue entre 1996 y 1999. En su último año, fue capaz de correr los 5.000 en 14'32” y los 3.000 obstáculos en 9'06”. Sin embargo, otra disciplina pasó a llamar más la atención de Hernando al acabar la mili y entrar en la Guardia Civil: el biatlón.

Fueron cuatro años (de los 24 a los 28) tan intensos como para, por increíble que parezca, lograr el billete para los Juegos Olímpicos de Turín 2006 en este deporte invernal. Sí, Hernando estuvo en el equipo nacional. Y no sólo en ese gran evento, sino también en la Copa de Europa y en la Copa del Mundo. Más tarde, entre los 28 y los 31 años, tocó otro cambio de disciplina. El burgalés aterrizaba en el esquí de fondo, sin quedar exento de alegrías en esta nueva experiencia deportiva: llegó al equipo español y a la Copa del Mundo, como en el biatlón.

Eso sí, no todo fueron buenos momentos. Fue en esta época cuando las lesiones hicieron mella en Luis Alberto por primera vez. En 2007, una hernia le llevó al quirófano. En 2008, lo hizo el peroné, ya que se lo rompió. ¿Freno a su devoción por la actividad física? Desde luego que no. Fue plata en el Mundial de Skyrunning de 2010 y la montaña (un año antes había iniciado un curso al respecto con la Benemérita) empezó a llamarle. En concreto, el esquí alpino.

Pero aún hay más. Después, llegaron los ultras. En esta modalidad fue campeón de Europa en 2013 (ganó la Trans D'Havet con, palabras mayores, Kilian Jornet), mundial en 2014 y de la Copa del Mundo en 2015. Entre medias, en 2012, fue campeón del mundo de las SkyRace Series. Una vez conseguido todo esto, llegaría su dominio en el trail running, ratificado una vez más este sábado.

Campeón del mundo en 2016 y 2017 (primero en Peneda-Gêres, Portugal, y en Badia Prataglia Italia), Hernando volvió a reinar en la disciplina tras imponerse en un recorrido de 85 kilómetros, con 5.000 metros de desnivel acumulado, que arrancaba en Castellón y terminaba en Sant Joan de Penyagolosa.

Segundo al paso por Benafigos, Hernando asumió el liderato de la prueba tras superar al estadounidense Zach Miller y, en los kilómetros finales, consumó la victoria. O, mejor dicho, la gesta, porque nadie había conseguido tres títulos seguidos en el trail running hasta que él apareció. En esta ocasión, con un tiempo de ocho horas, 38 minutos y 35 segundos. Sinónimo, gracias a él y al canario Cristófer Clemente, de doblete español en el Mundial.

El de Luis Alberto no fue el único oro de España, que también quedó primera por equipos en categoría masculina y femenina (con la plata de la castellonense Laia Cañés como mejor resultado). Aunque sí el más notable. Porque Hernando ha hecho de todo en su carrera deportiva… y todo bien. ¡Y aún tiene tiempo de priorizar su trabajo como guardia civil (ahora de montaña) sobre lo demás!