Las imágenes han corrido como la pólvora en redes sociales y el suceso ya ha conmocionado a los grandes amantes del montañismo. Un sherpa de origen pakistaní, conocido bajo el nombre de Mohamed Hasan, perdió la vida el pasado 27 de julio mientras apoyaba a las expediciones que subían el K2. Pero no es la primera vez que alguien pierde la vida durante el ascenso de la que es considerada la segunda montaña más alta del planeta. Y es que han sido muchos los escaladores que han muerto en los últimos años tratando de superar esta hazaña.
Sin embargo, en esta ocasión, las circunstancias en las que ocurrió el suceso y el hecho de que la víctima se trata de un sherpa local ha sido lo que ha generado un gran impacto entre los amantes de este deporte. En el vídeo, se puede ver claramente como el porteador Mohamed Hasan agoniza tendido en la nieve y sin poder moverse mientras el resto de los montañistas le pasan por encima sin prestarle ayuda con un único objetivo: llegar a la cumbre.
Según se ha podido saber a través del testimonio de algunos de los allí presentes, el hombre pudo estar en torno a tres horas agonizando sin que nadie le prestara ayuda. Aunque el vídeo dura pocos segundos, se ha confirmado que pudieron ser cientos los escaladores que pasaron por encima del sherpa sin socorrerle ni hacer nada por tratar de salvar su vida. Ese día, en torno a 145 escaladores consiguieron alcanzar la cima.
La escaladora búlgara Silvia Azdreeva ha sido una de las testigos que ha explicado lo que ocurrió el pasado 27 de julio en el Cuello de Botella, debajo del Gran Serac, uno de los tramos más complejos del K2. "Una persona murió frente a mis ojos. En un momento estaba vivo y luego, en el camino de regreso, tuvimos que saltar sobre su cadáver en el borde de hielo por el que estábamos pasando", explicó al medio Explorersweb.
Lo ocurrido ya ha indignado al mundo del deporte y, sobre todo, a los amantes del montañismo. La propia Silvia Azdreeva aseguraba que lo difundido en el vídeo es totalmente cierto y que no parar en estas situaciones es una falta de humanidad. "No hay nadie para salvarte tan rápido, tienes que esperar días", aseguró.
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Sin embargo, las versiones sobre lo que ocurrió aquel día continúan siendo semanas después muy diversas. A pesar de que algunos aseguran que lo que ocurrió fue una falta de ayuda en toda regla, otros como la escaladora australiana Allie Pepper. "Un escalador pakistaní se cayó y estuvo colgado bocabajo más de una hora. Lograron levantarlo. Al principio, estaba vivo, pero no pudo ser salvado. Entonces todos tuvieron que pasar por encima de él para dirigirse hacia la cumbre", explicó. Tras lo sucedido, el gobierno de la región pakistaní de Gilgit-Baltistan ya ha abierto una investigación acerca de las circunstancias de la muerte.
La versión de la escaladora a la que acompañaba el sherpa
Halung Dorchi, otro de los sherpas que estuvo presente durante lo ocurrido el pasado 27 de julio ha explicado qué fue realmente lo que ocurrió. Tal y como ha informado, a la víctima se le rompió la máscara de oxígeno tras caer y que fueron varios testigos los que le ayudaron a regresar con el equipo de Kristin Harila, la noruega que buscaba batir el récord.
La propia Kristin Harila ha explicado a través de su página web lo ocurrido. "Al principio, nadie se movió, probablemente por la conmoción y el miedo. Luego nos dimos cuenta de que estaba colgado bocabajo y no podía trepar por sí mismo. Debió haber caído casi 5 metros. Además, no vestía un traje de plumas y su estómago estaba expuesto a la nieve, el viento y las bajas temperaturas", ha añadido.
Tal y como ha detallado, tanto ella como varios miembros de su equipo trataron de auxiliar al sherpa. Sin embargo, después de varios intentos, una avalancha provocó un atasco que comenzó a impedir el paso de aquellos que querían subir. "Lama, Gabriel, el amigo y yo pasamos una hora y media en el Cuello de Botella tratando de levantarlo, antes de la avalancha y la llamada de socorro del equipo de reparación", ha explicado. La joven asegura que preguntó varias veces si los sherpas habían vuelto y que si necesitaban más ayuda o podían continuar. "Teniendo en cuenta la cantidad de personas que se quedaron atrás y que se habían dado la vuelta, creía que Hassan recibiría toda la ayuda posible y que podría bajar".
Aunque todavía está por confirmar, han sido varios los testigos que han asegurado que el sherpa no llevaba un equipo adecuado. La propia Harila ha abierto una recaudación de fondos para ayudar a la familia del fallecido. Por el momento, las ayudas han alcanzado los 100.000 euros.