La depresión europea del Madrid

El concepto depresión empieza a quedarse pequeño para definir la situación del Real Madrid en la Euroliga. En cinco jornadas ha perdido tres encuentros, el último de forma totalmente sorprendente ante el Estrasburgo, colista del grupo A y que llegó a dominar al conjunto de Pablo Laso por 18 puntos a pesar del escaso margen con que se cerró el encuentro (93-86).

Ni la buena racha de Rudy Fernández (17 puntos) ni el empeño inagotable de Sergio Llull (otros 17 puntos) evitaron que el encuentro se le fuera de las manos a los blancos desde los compases iniciales. Tres triples consecutivos, dos de ellos de Kyle Weems, abrieron una brecha de 11 puntos a favor de los franceses contra la que el Real Madrid remó a contra corriente durante el resto del encuentro.

Recuperado el aliento al final del primer cuarto, sin embargo, el Real Madrid fue totalmente incapaz de reconducir la situación. Entre Weems y Beaubois martillearon a un conjunto blanco que ni ajustó la defensa, ni consiguió bajar los porcentajes del tiro exterior rival. Tanto fue así que los de Vincent Collet, que habitualmente anotan 60 puntos por partido, se fueron hasta los 93 al final del encuentro.

Y eso que el Real Madrid, que llegó a caer por 18 puntos rebajó la diferencia a sólo seis con un grandísimo Jeffery Taylor. Una remontada insuficiente que deja a los blancos con sólo dos victorias en cinco jornadas, lo que empieza a ser preocupante de cara a la clasificación para el Top16.