En Turquía han puesto su nombre a una estrella de la constelación de Leo y es que Bogdan Bogdanovic es, probablemente, el mayor talento europeo que marchará la próxima temporada a la NBA. Antes, sin embargo, tiene dos retos -Euroliga y Juegos Olímpicos- en los que la palabra España aparece de forma recurrente.
En Phoenix no lo pueden admitir, de momento, pero ya están grabando su nombre en el vestuario local del Talking Stick Resort Arena. Desde que se hicieran con sus derechos hace dos temporadas, los Suns no quitan ojo a este extraordinario talento balcánico que madura bajo el influjo de Zeljko Obradovic a orillas del Bósforo. Escolta de innata calidad y gestos desgarbados que recuerdan al genio Mirza Delibasic afirma que Obradovic, más que un entrenador, es “un mentor".
Bogdanovic posa con una representación de la estrella que lleva su nombre.
"Después de haber tenido a muchos entrenadores puedo decir que es el mejor. En mi carrera ha sido fundamental. Aprendes mucho con él día a día sobre el baloncesto y sobre la vida. Hace el juego más sencillo y me encanta la libertad que te da en la pista para hacer muchas cosas”, afirma uno de los principales artífices de la primera victoria del Fenerbahce ante el Real Madrid en los cuartos de final de la Euroliga (máximo anotador con 17 puntos en el 75-69).
Ryan McDOnough es una de las personas que mejor conoce a Bogdanovic, aunque apenas se han cruzado un par de veces. El General Manager de los Suns trabaja para devolver a la franquicia a unos playoffs y no esconde su predilección por un jugador que “juega un poco más sin la pelota con el Fenerbahce que con el Partizan, donde tenía mucho protagonismo. Tiene tanta calidad que puede jugar como un base tradicional o generar peligro sin balón porque lee muy bien los bloqueos, por lo que es capaz de fabricarse sus tiros. Eso es algo muy importante para jugar en la NBA”.
El reto del Madrid sin Vesely...
Es uno de los clásicos en los duelos contra España con la selección de Serbia donde Djordjevic le dio galones de estrella. Ahora, en cuartos de la Euroliga, vuelve a medirse a un equipo español en un cruce con sabor a guerra ante el conjunto blanco, que además contará con el drama añadido de la incierta situación que vive Estambúl con inminentes amenazas de ataques terroristas.
Ya con el 1-0 para los turcos, Bogdanovic cree que la clave de la eliminatoria puede estar en “nuestra respuesta como equipo a la ausencia de Jan Vesely. Todos sabemos lo importante que era para nosotros. Pero no está y lo bueno es que hemos tenido tiempo para asimilarlo. No nos pillará desprevenidos. Las lesiones son parte del baloncesto y hay que aceptarlas”.
Rehuye el papel de estrella del equipo en ausencia del checo ya que “creo que estas situaciones se solucionan dando todos un paso adelante, no sólo yo. En este sentido Zeljko nos ayuda mucho porque tiene una gran personalidad y aunque a veces es muy duro (ríe), también es una persona maravillosa que te transmite su mentalidad y hace que el equipo confíe en sus posibilidades. Él sabrá conducirnos a la victoria”.
…y de la selección para estar en Río
Cuando acabe la temporada otro reto separa al alero de su marcha a la NBA. Se trata de los Juegos Olímpicos de Río, a los que Serbia acudirá si pasa el trámite del Preolímpico. "Creo que tendremos una buena oportunidad al jugar en casa. Por suerte lo afrontaremos en Belgrado, lo que espero que nos dé un extra de energía aunque también de presión. Llevamos unos años de éxito y necesitamos ganar cuatro partidos más para ir a los Juegos. Todos quieren estar allí igual que nosotros, por lo que será complicado y hay que respetar a todos los rivales. Aunque la ventaja de la pista tenemos que hacerla valer”.
Tras Río la NBA espera. McDOnough afirma estar “en permanente contacto con él, aunque no queremos presionarle. Le dijimos que sólo se centre en el Fenerbahçe, que trate de conseguir estar de nuevo a la Final Four de la Euroliga, que intente ganar la liga turca y siga desarrollando su juego. Es un jugador de un gran futuro y estamos felices de tener sus derechos. Tengo ganas de tenerlo en la NBA en un futuro próximo y ya vimos de lo que es capaz ante atletas americanos en el partido amistoso que su equipo jugó en Brooklyn a principios de temporada”.
Bogdanovic, junto a Adam Silver, el día que fue drafteado por Phoenix.
Bogdanovic responde a los elogios con un lógico “ya veremos, no le he pensado todavía”. Aunque reconoce tener “opciones de ir a la NBA, pero estamos en medio de la temporada y ahora no me preocupo por más cosas que por ganar el playoff de cuartos y estar en la Final Four de la Euroliga”.