El 23 de octubre de 2015, Estados Unidos anunciaba a Gregg Popovich como nuevo seleccionador tras los Juegos Olímpicos de Río de 2016. Mike Krzyzewski dejaba de ser el entrenador del todopoderoso combinado estadounidense que, desde que llegara al banquillo allá por 2006, se ha hecho con tres oros olímpicos, dos campeonatos del mundo y un bronce en el que Mundial que ganó España en Japón.
Una etapa brillante del baloncesto estadounidense en la que no han dejado de dominar el deporte del balón naranja sin apenas encontrar oposición. Tan solo la selección española fue capaz de hacer frente a un equipo conformado por extraterrestres, pero murió en el intento en las dos ocasiones que lo intentó.
La tarea de Popovich ahora, tras su nombramiento, es juntar a los mejores de todo el planeta Tierra para que suyugo no deje de asfixiar al resto de equipos. Este verano no hay competición pero, como cada año, las estrellas de la constelación NBA se han juntado en el Training Camp que organiza USA Basketball.
Un evento en el que ya ha dejado su impronta Coach Pop. El pasado 27 de julio, el técnico de San Antonio Spurs y la selección estadounidense, le prometió un coche a sus jugadores tras hacer varios ejercicios durante los primeros días del campus de entrenamiento. Lo que no sabían ellos es que se trataba de un coche de juguete, con el que se pudo ver a James Harden. Esto suscitó las risas de sus compañeros.
Anécdotas aparte, por ahí se han dejado caer algunos de los mejores jugadores del planeta, aunque con las ausencias de LeBron James y Stephen Curry, que se encuentran de vacaciones. Las Vegas ha tenido el honor de ser el escenario que viese entrenar juntos a las estrellas de la NBA y de la selección de Estados Unidos, pues de aquí saldrá un combinado digno del Olimpo.
El 'Dream Team' de Popovich
La 'federación' de Estados Unidos ha planificado sus dos próximos años, casualmente los que estará Coach Pop al frente del combinado nacional. Han elaborado una lista 30 jugadores con los que cuentan para el Mundial de China del próximo año y, cómo no, para la gran cita que espera cualquier fan del baloncesto, los Juegos Olímpicos de Tokio que se celebrarán en 2020.
Solo con mirar la lista ya asusta. Y es que, pese a no estar presentes en el campus de entrenamiento, en los planes de Popovich entran LeBron James y Steph Curry. El ala-pívot y el base son los dos jugadores que están capitalizando la NBA, aunque por encima de cualquiera está el flamante jugador de Los Ángeles Lakers. Pero, claro, la cosa no acaba ahí. El asunto pasa a mayores cuando se intenta conformar un quinteto titular.
A Curry y a 'El Rey' los acompañarían jugadores como James Harden, Kevin Durant y Anthony Davis. Además, habría que tener en cuenta la presencia de Kyrie Irving, Russell Westbrook, Demar DeRozan o DeMarcus Cousins. Este último formaría parte del 'quinteto' que los Golden State Warriors aportarían a la selección, junto con Draymond Green y Klay Thompson.
¿A la altura de Barcelona 92?
Solo el tiempo podrá responder esta pregunta, aunque otros lo han intentado y han perecido en el intento. Desde que Estados Unidos arrasara en Barcelona 92 con el considerado mejor equipo de todos los tiempos, las selecciones norteamericanas venideras han recibido el apodo de 'Dream Team'. La herencia recibida, pero lo cierto es que no han sido capaces ni de acercarse al talento del único y verdadero equipo de ensueño.
Doce jugadores unidos para ganar y, sobre todo, para dar espectáculo. Esta era la premisa desde la que partía el combinado de Chuck Daly. Michael Jordan, Magic Johnson, Larry Bird, Karl Marlone, John Stockton, Scottie Pippen, Chris Mullin, Charles Barkley, David Robinson, Pat Ewing y Clyde Drexler. Una ristra de grandes nombres a la que sumó la eterna promesa de Christian Laettner.
El baloncesto evocaba un cierto aroma a Showtime en el que influía el ingenio de Magic Johnson. Un juego vistoso para demostrar que nadie sabe ni puede hacerlo como ellos. Su mera presencia asustaba al resto de rivales. Ante este Olimpo del baloncesto sucumbió la Croacia de Drazen Petrovic y sin despeinarse. Un torneo difícilmente superable, pues tan solo está al alcance de los dioses.
No obstante, por nombres, el de LeBron y compañía podría equipararse al de Michael Jordan. La eterna analogía hasta en esto. Michael y James sufren las constantes comparaciones, incluso se llega a estipular a King James como el mejor jugador de todos los tiempos, desbancando al '23' de Chicago Bulls.
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